Muy cerca de Bogotá, en la ruta hacia los Llanos Orientales , se encuentra un tesoro escondido que pocos conocen: la quebrada Las Perdices, un río de aguas cristalinas con un inigualable color azul celeste que invita a la aventura y al contacto directo con la naturaleza.
Ubicada en el municipio de Guayabetal, este destino natural es uno de los pocos lugares donde aún se puede disfrutar libremente de un baño en sus aguas sin restricciones.
Perfecto para aquellos que buscan desconexión y tranquilidad, Las Perdices se ha convertido en un refugio para los amantes de la naturaleza.
¿Cómo llegar a
Las Perdices desde Bogotá?
Para visitar esta maravilla, debe tomar la ruta Bogotá-Villavicencio.
Aproximadamente a una hora y veinte minutos de la capital, llegará al municipio de Guayabetal. Una vez allí, solo necesita preguntar a los locales, quienes con amabilidad le indicarán cómo llegar a la quebrada, situada cerca del mercado central del pueblo.
En redes sociales como TikTok hay varios videos que muestran la maravilla de este río cristalino que con aguas azules sorprende a los turistas que llegan a nadar.
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¿Qué hacer en Guayabetal?
Además de disfrutar de Las Perdices, Guayabetal ofrece múltiples actividades para todos los gustos:
- Paseos ecológicos: Recorre senderos rodeados de exuberante vegetación y descubre otros encantos naturales como El Limonar o las playas del río Blanco.
- Avistamiento de aves: Este municipio es ideal para los observadores de aves gracias a su riqueza de ecosistemas, donde puedes encontrar especies endémicas y migratorias.
- Deportes extremos: Si prefieres la adrenalina, Guayabetal también tiene opciones como canotaje, rappel, escalada y parapente. El cañón de Chirajara es uno de los lugares más recomendados para estas actividades.
Guayabetal y su quebrada Las Perdices son un recordatorio de la belleza natural que aún se conserva en Colombia. Un plan perfecto para escapar del ruido de la ciudad y reconectar con lo esencial.