La superintendente de Transporte, Andy Lucy Ospina, contó detalles alarmantes sobre presuntas irregularidades en las escuelas de conducción en Colombia. Según indicó, actualmente existen 1,235 habilitadas o con autorización del Ministerio de Transporte para ofrecer el servicio de formación en la conducción. Sin embargo, se descubrió que 23 de estas estaban emitiendo certificados falsos y otorgando licencias de conducción sin que los alumnos hubieran completado los cursos.
Estas escuelas fraudulentas fueron suspendidas temporalmente como medida preventiva. Están ubicadas en diferentes regiones del país, incluyendo Bogotá, Antioquia, la costa y otras áreas como Caldas y Tolima. La investigación reveló que las utilizaban diversas “estrategias”, como la copia de huellas con silicona para falsificar la asistencia de los instructores y los alumnos a las clases.
En diálogo con Mañanas Blu, con Camila Zuluaga, la superintendente hizo énfasis en la responsabilidad de los aspirantes a obtener una licencia de conducción . Señaló que estos individuos también tienen una gran responsabilidad en los hechos de corrupción, ya que se prestan para que las escuelas les tomen la huella y así suban clases en su nombre sin haber asistido realmente.
“Entonces, como los controles que tenemos implementados se hacen controlando la verificación del instructor, la verificación de la apertura de la clase y el cierre de la clase con su huella, descubrimos que mediante esas artimañas están migrando clases que no dictaron. Yo hago una invitación muy especial también a quienes aspiran a obtener una licencia de conducción o a quienes la van a recategorizar, que también tienen una responsabilidad muy grande en estos hechos de corrupción, porque ellos se prestan para que la escuela les tome la huella y después suban la clase y la huella de ellos, como si hubieran asistido a la clase”, detalló.
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Aseveró que este es apenas el inicio de todo un proceso de investigación que están haciendo “muy fuerte hacia la totalidad de las escuelas”, verificando a los alumnos y verificando a los instructores. En ese sentido mencionó que se están implementando medidas para garantizar que los alumnos inscritos en las escuelas suspendidas reciban su formación completa. Además, se está evaluando la posibilidad de trasladar los casos de fraude a la Fiscalía, ya que tanto las escuelas como los alumnos podrían enfrentar consecuencias legales.
Esta no es la primera vez que se exponen casos de corrupción en las escuelas de conducción en Colombia. La Superintendente reconoció que existe un problema persistente en el país, donde algunas escuelas fraudulentas entregan licencias de conducción sin que las personas hayan completado los cursos.
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Precisó que el factor humano es fundamental en este problema, ya que muchas personas buscan evadir la ley y obtener beneficios ilegalmente.
Vea la entrevista completa en Mañanas Blu, con Camila Zuluaga:
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