Recientemente se habría presentado el primer caso de hackeo a la señal del GPS en el mundo, algo conocido como GPS spoofing, que se convertiría en un arma militar de ciberguerra.
El hecho habría sucedido cuando 20 barcos que pasaban por el Mar Negro cerca a la costa de Ucrania de un momento a otro cambiaron su ubicación.
Lo más curioso es que los GPS de los barcos mostraron la misma ubicación, a más de 30 kilómetros de donde se encontraban realmente.
Y es que las posibilidades del ‘spoofing’ en el ámbito militar son grandes, pues en este caso lo que se hace es mostrar una ubicación falsa para confundir al enemigo o enviarlo a un lugar no planeado.
Publicidad
El ataque significaría que el dueño de la tecnología podría desviar incluso a aviones o buques enemigos.
Publicidad