En entrevista con La Nube, de Blu Radio, los influenciadores Juan Pablo y Carolina, de 'Mis propias finanzas', compartieron su experiencia de haber perdido su cuenta de Instagram y destacaron la importancia de diversificar en las redes sociales.
Juan Pablo y Carolina son una pareja de esposos que se han convertido en referentes en el ámbito de la educación financiera. Su marca, 'Mis propias finanzas', cuenta con más de dos millones y medio de seguidores en redes sociales y ofrece programas de formación en finanzas personales a través de su plataforma online.
Sin embargo, a pesar de su éxito, la pareja enfrentó un duro golpe cuando su cuenta de Instagram, que tenía casi un millón de seguidores, fue deshabilitada repentinamente. Durante cinco días estuvieron sin acceso a su cuenta y perdieron todo el contenido que habían creado en cinco años, incluyendo más de 2.800 publicaciones y más de 300 transmisiones en vivo.
"El miércoles pasado nosotros estábamos lanzando uno de nuestros programas de 'Mis propias finanzas', un programa de inversiones. Y al otro día, por la mañana a 6:00 de la mañana nos llegó un mensaje al correo diciendo que nuestra cuenta de Instagram había sido deshabilitada", contó Juan Pablo.
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El impacto de esta pérdida fue devastador para Juan Pablo, Carolina y su equipo, pues, además, estaban en el lanzamiento de uno de sus programas de inversión. El cierre de su cuenta los dejó sin la posibilidad de alcanzar a su audiencia y sin respuesta por parte de Instagram sobre la causa de la deshabilitación.
Según los influenciadores, no saben exactamente porqué les cerraron la cuenta, pero creen que fue uno de los algoritmos de Instagram que funciona con inteligencia artificial y sacó alguna frase o contenido de su contexto original y los bloqueó.
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¿Qué hicieron los influenciadores de 'Mis propias finanzas'?
Afortunadamente, contaron con el apoyo de su comunidad y seguidores, quienes compartieron su situación y ayudaron a difundir su nueva cuenta de Instagram, la cual logró recuperar rápidamente miles de seguidores. Además, recibieron la buena noticia de que su cuenta original había sido habilitada nuevamente después de contactarse con algunos trabajadores de Meta.
Así apelaron la decisión y pudieron recuperar el contenido que habían trabajado durante años, pero también se quedaron con su cuenta de respaldo.
Esta experiencia les dejó importantes lecciones sobre la vulnerabilidad de depender exclusivamente de una red social y la importancia de diversificar en las plataformas digitales. Juan Pablo y Carolina destacaron la necesidad de tener un plan B y de no centrar toda la estrategia de marketing en una sola plataforma. Recomendaron a los emprendedores tener cuentas de respaldo y aprovechar otras herramientas como la lista de correos y la generación de tráfico hacia su sitio web.