La dislexia es un trastorno del aprendizaje que dificulta que niños y adultos lean, escriban y deletreen. La condición afecta a una de cada cinco personas y representa entre el 80% y el 90% de las personas con problemas de aprendizaje.
Sin embargo, el nuevo programa Dysolve AI puede corregir la dislexia, condición que alguna vez pareció permanente. La tarea está más allá incluso de los especialistas humanos más calificados, según Coral Pau-San Hoh, directora ejecutiva de Dysolve y cofundadora de la plataforma de esta inteligencia artificial que genera juegos verbales interactivos personalizados para evaluar a cada paciente.
Si bien Dysolve utiliza técnicas de gamificación, no es una plataforma de entretenimiento. Las respuestas de los estudiantes generan nuevos contenidos de juego evaluativos y correctivos. A través de la corrección diaria, el sistema de IA resuelve las dificultades de procesamiento subyacentes de los estudiantes.
El software ha ayudado a cientos de estudiantes de primaria a corregir sus habilidades de lectura y aprendizaje y, está siendo sometido a ensayos clínicos para evaluar su potencial para un uso generalizado en las escuelas.
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“Los niños disléxicos tienen una dificultad enorme. Tiene que haber un programa temprano para mejorar la lectura y técnicas de vocalización como parte de la instrucción escolar formal. Eso era difícil de hacer antes de que tuviéramos la inteligencia artificial”, dijo Hoh.
Camino voluntario para desplazar la dislexia
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Ese viaje hacia la creación de Dysolve comenzó cuando una amiga le dijo a Hoh que su hija tenía dificultades con la lectura en la escuela y le dijo que el costo de la evaluación era de $2,000 dólares. Hoh se ofreció a trabajar con la niña de forma gratuita como una forma de probar su enfoque para tratar la dislexia. Esa oportunidad generó “clientes” adicionales para realizar pruebas.
La IA fue probada con numerosos estudiantes con una variedad de condiciones que involucraban problemas de lenguaje muy graves y discapacidades múltiples. Mientras trabajaba con sus grupos de prueba, se dio cuenta de que la dislexia es más que una sola cosa.
Comenzó a notar conexiones en torno a las dificultades en el procesamiento del lenguaje que se manifestaban en todos los grupos de edad hasta ser adultos.
De esta manera, utilizó la investigación para construirun sistema informático para la creación de juegos autónomos en tiempo real basándose en los síntomas observados y el rendimiento de las pruebas.
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Su objetivo era crear una plataforma informática impulsada por la IA capaz de abordar cada caso de forma individual. "Este proceso requirió la integración de una microsonda en el cerebro para identificar la ubicación de los problemas de procesamiento".