La imposición de la ceniza, ritual católico con el que da inicio el periodo de cuaresma que antecede la Semana Santa, tendrá importantes cambios en la pandemia. El miércoles de ceniza, es la señal de un espíritu de conversión y arrepentimiento de los pecados, de acuerdo con la interpretación religiosa.
Sin embargo, el tradicional signo será diferente en cuanto a su imposición debido a la pandemia del COVID-19.
Este año no habría marca en la frente, sino que los sacerdotes dejarán caer una pequeña cantidad de ceniza seca en la cabeza de los fieles.
De esta manera, se evitará el contacto obedeciendo a las normas de bioseguridad.
Publicidad
Lo que dice la Santa Sede
Publicidad
De acuerdo con las instrucciones emitidas desde el Vaticano a inicios de este año, el procedimiento será así:
- Primer paso: El sacerdote bendice la ceniza.
- Paso dos: Las cenizas serán mezcladas con agua bendita.
- Paso tres: El presbítero rezará las tradicionales oraciones: "Convertíos y cree en el Evangelio" o "Acuérdate que polvo eres y que al polvo volverás.
Publicidad
- Paso cuarto: El sacerdote esteriliza sus manos y se pone el tapabocas de manera adecuada.
- Paso quinto: El padre indicará a los fieles si se acerca en fila, con el correspondiente distanciamiento físico o si la distribuirá a cada feligrés en su sitio, de pie.
Publicidad
- Paso sexto: El sacerdote tomará la ceniza y la dejará caer sobre la cabeza de los fieles, sin mediar palabra.
Las directrices del Vaticano fueron ratificadas por la Conferencia Episcopal Colombiana (CEC).
"Este año, por motivo de la pandemia, la Iglesia, desde Roma, ha orientado colocar la ceniza, no realizando la cruz en la frente, sino echando un poco de ceniza sobre la cabeza de las personas que desean recibirla", comunicó el episcopado.
En líneas generales, la CEC recomendó que los sacerdotes o diáconos esparzan un poco de ceniza sobre la cabeza de los fieles, en lugar de imponer la cruz de ceniza en la frente, como se estableció en la directriz de la Santa Sede.
Publicidad
Conozca la comunicación de la CEC:
Publicidad
En Bogotá
En la capital colombiana así como en las distintas arquidiócesis del país, se dará libertad a los obispos para el ritual. La Aquidiócesis de Bogotá recomienda que la ceniza se entregue en la mano izquierda de los fieles, y con la mano derecha cada uno se pinte el símbolo de la cruz en la frente. En total, en la principal ciudad del país, se mencionan tres alternativas.
En primer lugar, en Bogotá se podrá dar la imposición de la ceniza en la liturgia.
"La ceniza se entregará en la mano izquierda de los fieles y cada uno trazará sobre su frente el signo de la ceniza. Los ministros pondrán la ceniza en la mano de los fieles utilizando una cuchara pequeña", comunicó la Arquidiócesis de Bogotá.
Publicidad
La segunda alternativa es la celebración de la palabra e imposición de la ceniza fuera de la misa.
"Se respetará estrictamente el aforo autorizado para cada templo, de modo que los fieles entren por grupos. Después de cada celebración de la Palabra, se hará la desinfección del lugar y seguirá el siguiente grupo", indicó el clero.
Publicidad
La opción final es la imposición del rito de la ceniza en el hogar.
"Los sacerdotes dispondrán pequeñas porciones de ceniza para las personas que la soliciten con la sana intención de celebrar en casa, este sacramental. Modalidad que será divulgada a las familias, por WhatsApp, correo y la página web, de cada parroquia", comunicó la Iglesia.
Conozca la comunicación oficial de la Conferencia Episcopal Colombiana al respecto:
Publicidad
Escuche este informe en Meridiano BLU: