La salud mental es una problemática que aqueja constantemente a la sociedad y que altera la estabilidad emocional de las personas. En ocasiones, esto puede traspasar lo laboral y llegar a lo familiar, afectando la relación entre seres queridos, por eso, hay que saber controlar las diferentes emociones que se presentan.
La psicóloga Manuela Molina, en diálogo con Generaciones Blu, habló sobre las consecuencias de responsabilizar a los niños de las emociones de los adultos.
“Los hace mucho más susceptibles a los abusos y también empieza a instaurar esa semilla de la manipulación. El desarrollo emocional de los niños es importante desde temprana edad, ya que cada acción influye en su personalidad y percepción”, dijo
Según Molina, cada persona debe hacerse responsable de los problemas que puede afectar su estabilidad emocional, por lo que es necesario saber resolver esas complejidades de manera sana y optima.
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“Los únicos responsables de nuestro mundo emocional somos nosotros mismos. Nuestros hijos no tienen ninguna responsabilidad de lo que nos ocurre. Si queremos recurrir de su apoyo necesitamos entender que también son pensantes y nos pueden comprender”, aseveró.
Además, la psicóloga Molina recalcó que la relación que se tiene dentro de la familia se debe basar en el respeto, pero también entendiendo que cada persona tiene problemas que los aquejan y que alteran sus emociones.
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“Hay que entender que la relación entre padres e hijos es de mucho respeto. Cada persona tiene una vida emocional diferente. El niño también va a empezar a desarrollar sus propios problemas que los van a aquejar y, en ese orden de ideas, las adversidades que se presenten no pueden influir en la relación familiar”, finalizó.
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