En una sociedad marcada por la rápida evolución tecnológica y cambios culturales significativos, el fenómeno de los niños que adoptan comportamientos propios de los adultos se convierte en una preocupación para las familias. En En Blu Jeans estuvo el docente del Área Andina en el programa de Psicología Andrés Gamba, quien habló del ambiente donde crecen los niños.
"Vivimos en una época confusa porque tendemos a adoptar roles que no nos corresponden", afirmó.
Según Gamba, la principal “problemática” radica en la forma en que los niños abordan el juego de ser adultos dado que en estos juegos ellos pueden tomar preocupaciones y responsabilidades que no son de su etapa de vida.
"Es normal que los niños jueguen a ser adultos, eso es parte de la vida (...) El problema es que estos niños no juegan a ser adultos, sino que quieren ser adultos el 100 % del tiempo", mencionó.
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Este fenómeno, señaló Gamba, no se limita únicamente a la influencia familiar, sino que está intrínsecamente relacionado con la cultura, la publicidad, las redes sociales y los medios de comunicación modernos, los cuales replican un ideal de infancia y de comportamiento.
"Hay pocos referentes infantiles. Lo que tenemos es gente adulta que se hace pasar por niños o los niños que se destacan en las redes sociales son niños que son adultos o que se ven como adultos, pero ya no tenemos referentes de ese niño que se comporta como niño", agregó.
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La sobreexposición a roles adultos puede verse agravada en entornos familiares con brechas generacionales amplias, en la cual en el entorno hay más adultos que niños.
"Los padres, en muchos casos, están teniendo hijos a edades más avanzadas, lo que puede influir en la dinámica familiar y en la manera en que se crían a los niños", indicó.
El psicólogo advirtió sobre las consecuencias a largo plazo para estos niños, catalogados como "sobre adaptados". A medida que crecen, enfrentan dificultades para interactuar con otros niños y pueden asumir roles de cuidadores, descuidando su propio bienestar.
"Algunas investigaciones nos han dicho que los niños sobre adaptados, a veces, se convierten en adultos que todo el tiempo están en función de ayudar o de salvar a otros y se descuidan a sí mismos. Desde muy pequeños empezaron a asumir responsabilidades que no les tocaban. Empezaron a preocuparse demasiado sobre el mundo", señaló.
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Gamba enfatizó en la importancia de recordar que siguen siendo niños y no sobrecargarlos con responsabilidades ajenas a su edad, fomentando espacios de juego y socialización "tanto en casa como en entornos educativos, para que los niños puedan desarrollar habilidades sociales adecuadas para su etapa de vida".
Por último, Gamba hace un llamado a proporcionar a los niños un entorno que les permita disfrutar de su infancia.
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“A nosotros no nos tenían que enseñar esto porque teníamos 20 primos, ahorita lo que tenemos son navidades de adultos, son el 24 de diciembre. Lo que vamos a tener es un árbol con un montón de regalos para un solo niño que no tiene cómo compararlo con otros niños. Seguir creando espacios de niños”, puntualizó.