Fundadora de la Feria Buró pidió disculpas, pero evitó referirse al episodio de la pizza negada

Feria Buró, el evento que se desarrolla esta semana en Bogotá se convirtió en tendencia en redes sociales debido al escándalo que surgió por un pedazo de pizza.

Pablo Matiz, quien trabajó para el evento denunció en redes sociales que la fundadora del evento, María Alejandra Silva Soto, le negó un trozo de pizza a un colaborador. Según la versión de Matiz, él le insistió en tres oportunidades y ella no dio su brazo a torcer.

Después del encontrón, Matiz asegura que fue despedido, pero que acudió al día siguiente al evento a almorzar con su novia. Sin embargo, fue sacado por la fuerza del lugar.

El bochornoso episodio se convirtió en la comidilla de redes sociales en Colombia, especialmente e Twitter, donde llovieron críticas a María Alejandra Silva Soto por su supuesto egoísmo y, según algunos, arribismo.

Agobiada por miles de críticas María Alejandra Silva Soto tuvo que salir este jueves a explicar que se había negado a darle la pizza al colaborador por motivos de la pandemia y que no le pareció que fuera algo bioseguro entregarle a alguien un alimento que hubiese pasado por varias manos.

Sin embargo, la explicación no convenció a muchos y los señalamientos a Silva Soto se multiplicaron, hasta hacerse viral un video que muestra a la gestora en una dura riña en 2018. El denunciante, aseguró que su familia fue víctima, además, de asedio y acoso.

En medio del escándalo creciente, finalmente en la noche de este jueves María Alejandra Silva Soto publicó un video en el cual pidió disculpas. Sin embargo, evitó referirse al episodio de la pizza negada.

“Quiero disculparme del corazón por todas las acciones que los han perjudicado, perturbado o incomodado el día de hoy”, declaró Silva Soto.

“Les invito a que nos unamos a una reconciliación, a un perdón, soy humano, somos humanos. Soy una humana en aprendizaje y que como líder de esta iniciativa aún tengo que aprender”, agregó.

Quienes pescaron en río revuelto en medio del escándalo fueron las pizzerías, dos en especial, que aprovecharon la oportunidad y repartieron pizza gratis en el lugar donde se lleva a cabo la Feria Buró, con el fin de hacerse publicidad.