La Universidad de Oxford reveló en la revista Nature que las personas contagiadas con COVID-19 sufrían una variación en la materia gris del cerebro

Presentaban nubosidad mental

Luego de comparar las resonancia magnéticas de 785 personas que había padecido la enfermedad, los investigadores se percataron de que el virus afecta la regiones del cerebro que controlan el sentido del olfato y la memoria

Compararon el antes y el después

Los ligeros cambios se apreciaron en los pacientes hospitalizados por COVID-19, pero los científicos aún no saben si son permanentes o temporales, pues enfatizan en la gran capacidad que tiene el cerebro de recuperarse

Los voluntarios mostraron una baja en el nivel de concentración y organización tras la reducción del 0.2 % y un 2 % de la materia gris del cerebro

También, se demostró que las personas que se habían recuperado recientemente presentaban dificultades para realizar tareas mentales complejas

El estudio revisado por el Biobanco del Reino Unido se realizó en pacientes entre los 51 y 81 años, mientras la variante alfa predominaba en ese país

La investigación no reveló detalles si la vacuna genera algún impacto en las secuelas que deja el virus, pero la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido, agregó, que tras verificar 15 estudios, las personas vacunadas tenían la posibilidad de reducir a la mitad el desarrollo de los síntomas

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