Un perro en tu vida es un maravilloso facilitador social y representa una fuente innegable de amor incondicional y lealtad. Además, llenará de beneficios su vida. Tendrás compañía y soporte emocional: al interactuar continuamente con su perro, mejorará su estado emocional mental y físico ya que incrementará la actividad física que realice y con esto se reducirá el riesgo de que sufra alguna enfermedad propia del sedentarismo.
Por otra parte, al adoptar a un perro también existe un beneficio para toda su comunidad ya que está contribuyendo directamente a que menos peluditos deambulen sin dueño y evitará que vayan a representar un riesgo para la salud pública. Y la razón más importante, le está dando una nueva oportunidad de vida a un perro, sin mencionar que le está otorgando la oportunidad de tener una familia que se haga responsable de él y le garantice los requerimientos básicos para su bienestar.
Hay que reconocer además, la labor de los refugios o centros de adopción que le prestan un servicio invaluable a la sociedad, ya que, además de reubicar estos hermosos compañeros en familias responsables, promueven la salud pública y el bienestar animal.
Recomendaciones para recibir un peludito en casa:
1. No olvide que, al recibir al nuevo miembro en su familia, el centro de adopción debe hacerle entrega de su carné de vacunación. En este se debe indicar cuáles son las vacunas que se le aplicaron al canino y la fecha en que debe ser aplicada la próxima.
2. En el momento en el que vaya a recibir al nuevo miembro de su familia, es oportuno preguntar por el tipo de comida con la que se ha venido alimentando. Lo adecuado es seguir ofreciendo este mismo alimento e ir haciendo leves cambios hacia el concentrado que usted ha elegido y así evitar alteraciones en la salud del perro.
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3. Si adopta sin ninguna historia clínica (suele suceder cuando usted adopta un peludo de la calle), acuda a un veterinario para iniciar un protocolo de vacunación con el fin de proteger su salud, la suya y la de toda su familia.
4. Recuerde, además, que los centros de adopción responsable siempre entregan en adopción perros esterilizados y jamás ofrecen un perro agresivo ni le hacen entrega de perros a personas que no tienen la capacidad para hacerse responsables de ellos.
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5. Cuando considere adoptar un perro, recuerde escoger la raza o tipo de perro que se adapte mejor a tu estilo de vida, presupuesto, espacio y nivel de compromiso.
Tenga en cuenta que para garantizar el bienestar de un perro se requiere de tiempo, atención y recursos. Así que asegúrese de proveerle a este nuevo integrante de su familia un hogar amoroso y donde se sienta protegido.