De acuerdo a la historia, los Muiscas realizaban rituales en los que un Rey se vestía de pies a cabeza con oro y a su vez arrojaban objetos bañados con este metal precioso a las aguas de la laguna de Guatavita.
Y fue precisamente esa leyenda, la que llamó la atención de los españoles, quienes en esos tiempos buscaban tierras desconocidas para la civilización y poder ser con conquistadas; El Dorado se volvió una obsesión para los conquistadores hispanos.
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Para Hilda Mora, arqueóloga e investigadora El Dorado o “Imperio Omegua” es considerado un “reino donde habría una gran cantidad de riquezas y de oro”.
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De acuerdo a cronistas, la tribu de os Muiscas controlaba y distribuida todo el oro de la sábana, proveniente de un solo lugar, el río Coello en el Magdalena.
En la actualidad, interesados en el tema y algunos investigadores continúan buscando ese lugar legendario que al parecer, según lo informó Mora en Luna BLU, estaría ubicado en las serranías colombianas del Meta.