“Se ha convertido en un potencial turístico de una ciudad que por supuesto tiene monumentos y zonas visitables muchísimo más importantes que este ‘ecceHomo’, pero que sin duda ha sido un revulsivo para que turistas de todo el mundo vengan y visiten Borja,”, dijo.
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#PintaABolivar Me imagino a la restauradora del #eccehomo de Borja pintando un retrato de Simón Bolívar #BuenViernes pic.twitter.com/sgfSm3XD9Z
— Felix Moronta (@morontafelix) January 8, 2016
Todo comenzó en agosto de 2012, cuando Cecilia Giménez situó al municipio en el mapa mundial debido a los retoques que hizo a esta pintura mural de principios del siglo XX del artista aragonés Elías García Martínez, que quedó deformada.
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La noticia del intento de restauración no tardó en expandirse por las redes sociales y los medios de comunicación de todo el planeta se hicieron eco del hecho.
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Así, el eccehomo de Borja se convirtió en poco tiempo en un fenómeno viral en Internet, donde se propagaron como la espuma los chistes y los fotomontajes -los denominados "memes"- comparando al eccehomo con todo tipo de "celebrities" o con pinturas famosas como la Mona Lisa de Da Vinci.
“Cecilia no tuvo mala fe, ella quiso intervenir en un fresco que ya estaba prácticamente destrozado, ella con buena voluntad, como siempre ha tenido, intentó reparar, arreglar, restaurar. El problema que tuvo es que por la situación del inmueble y la humedad que tenía, a la columna se le vino encima toda la pintura anterior y además tuvo que dejarlo sin terminar”, dijo.
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Ardila aseguró que la fundación decidió que el fresco se quedara como está y descartó alguna intervención para recuperar el que estaba.
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