El Día de San Valentín, celebrado cada 14 de febrero, invita a reflexionar sobre el amor y las relaciones personales, rememorando la historia de un valiente médico romano que, por amor, desafió las leyes de su tiempo. Esta fecha simboliza no solo el amor romántico, sino también la importancia de la afectividad en el desarrollo personal y libertad. Sin embargo, la línea entre el amor saludable y la dependencia emocional, es decir, una relación tóxica, puede ser delgada y difusa.
Claudia Gutiérrez, profesora del pregrado en Psicología de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad del Rosario, recordó que San Valentín es un momento ideal para considerar cómo las relaciones afectivas influyen en el crecimiento personal. Sin embargo, advirtió sobre la posibilidad de caer en relaciones románticas que pueden llevar a la dependencia emocional y la pérdida de libertad.
Las relaciones románticas atraviesan varias fases, desde la influencia de los pares en la iniciación hasta el compromiso donde se elige a parejas que complementan las personalidades y objetivos. Estas etapas, marcadas por el aprendizaje personal y el desarrollo de una imagen integral que incluye el ser parte de una pareja, son cruciales para entender la naturaleza de las conexiones amorosas.
Al hablar de relaciones románticas, algunos autores han propuesto varias fases o estadios. El profesor Benson Bradford Brown, experto relaciones entre pares adolescentes, propone un modelo contextual y del desarrollo para las relaciones románticas que contempla la necesidad de que los adolescentes necesitan aprender más de sí mismos como personas y desarrollar una auto imagen integrada, que incluya el ser una pareja como parte más amplia del ser
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¿Cómo diferenciar el verdadero enamoramiento y una relación tóxica?
Gutiérrez compartió unos criterios para evaluar las relaciones afectivas, basados en un cuestionario de dependencia emocional desarrollado y validado en Colombia. Estos ítems invitan a reflexionar sobre la autonomía, bienestar emocional en el contexto de la pareja. Si se siente desamparado cuando está solo, prioriza a su pareja sobre todas sus actividades, o experimenta inquietud y vacío en su ausencia, es momento de cuestionar la naturaleza de su relación.
La distinción entre amor y dependencia emocional reside en la diferencia entre querer y necesitar. La cultura juega un papel importante en cómo hombres y mujeres experimentan y expresan estas emociones, con tendencias hacia la dependencia marcadas por el temor a la soledad o la búsqueda de atención.
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Finalmente, la profesora Gutiérrez invitó a las personas a celebrar San Valentín como esas experiencias y afectos que “hacen crecer como personas y a vibrar como las cuerdas del laúd, con la armonía de la vida”.
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