Giovanny Rubiano, director del Instituto Nacional de Salud (INS), aseguró que aunque las cifras de quemados con pólvora hayan sido más bajas que las de 2021, no puede cantarse victoria y aseguró que un solo caso ya es alto; el funcionario, además, sostuvo que la peligrosidad de la pólvora es alta, incluso en aquella que se considera inocua como totes y 'chispitas', entre otros.
"Podemos ver el grado de impacto sobre la salud de los menores.Están los totes, las chispitas, los voladores, los volcanes, las papeletas, los tacos y las mechas, en su orden. Es que además que afectan y pueden quemar, los más pequeñitos pueden tomárselo y generar una intoxicación por fósforo blanco que es fatal, puede desatar una falla hepática y la persona se muere, pero la gente percibe bajo riesgo y esto es falta para los más niños, a quienes más tenemos que cuidar como sociedad", indicó Rubiano.
Sobre el número de lesionados con pólvora, el funcionario aseguró que ya van 503 casos y confirmó que son 181 los niños quemados en la temporada de fin de año. El funcionario pidió hacer énfasis en el tema de la sensibilización acerca de los graves daños que se pueden generar por esta actividad.
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"El 50% de los casos se concentran en Bogotá con 55, Antioquia, 54, Nariño 34, Cauca 29, Santander y Córdoba 26 cada uno, Tolima 24, Cundinamarca y Norte de Santander 21 y Valle 20.En el 2021 teníamos a diciembre al 24 de diciembre 72 casos y el 25 de diciembre 110, para un total de 182. El comparativo para este año, el 24 fue de 49 y el del 25, 56. Vamos en 105 casos, pero independiente de la cifra como tal tenemos que hacer consciencia social", sostuvo Rubiano.
"Este es un tema que no es menor y que le corresponde a los adultos tener esa responsabilidad, no podemos ni siquiera echar totes, ni chispitas, mucho menos los voladores. recordemos que un accidente esto es muy grave, las consecuencias son nefastas para el sector salud, para todo el sistema. Recordemos que las partes más afectadas en los niños pues son la cara, los ojitos, la nariz, las oídos y las manos. La cicatrización posterior por estas lesiones por pólvora son dramáticas; es decir, habría que mostrar fotos o videos cómo es la evolución y la lentitud de la recuperación de estos pacientes, para eventualmente hacer más conciencia sobre el tema", agregó el funcionario.
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