Por lo menos, 4.7 millones de haitianos viven en la pobreza, según calcula la ONU. Esta situación expone a los habitantes a la epidemia del cólera, al consumir bebidas y alimentos contaminados

Se estima que por lo menos la mitad de los enfermos, son niños menores de 14 años, quienes son más vulnerables por su sistema inmunológico que se encuentra debilitado por la desnutrición a causa de la pobreza

Ante el incremento de los casos, los trabajadores humanitarios califican el regreso de la epidemia del cólera como una catástrofe en el país más pobre de la región, debido al poco acceso a la atención sanitaria que tienen

Esto se debe a que la mayoría de los casos se encuentran aislados por la falta de combustible que impide que sean transportados a un centro de salud o por la delincuencia de las bandas armadas que impiden el acceso a los médicos

Sin una debida atención, los enfermos se exponen a morir de deshidratación por la diarrea aguda, pero en el mejor de los casos, los pacientes solo necesitan reposo y rehidratación para sanar

Además, ante las poca camas que tienen los centros de salud, la atención de los centros se dificulta por el incremento de los casos

Puerto Príncipe, la capital del país, es una de las zonas que más se ha visto afectadas, pues según el doctor Jean William Pape, uno de los centros en el que trabaja solo tiene 80 camas y todas están ocupadas

El Ministerio de Salud de Haití, anunció que hasta el 19 de octubre, se había presentado 33 muertes por cólera de los 960 casos sospechosos reportados, pero se teme que estas cifras aumenten

Según los expertos, por temor a un secuestro por parte de la bandas armada que impiden el acceso a los hogares para su debida desinfección con alcohol

En 2010, luego del terremoto de siete grados en la escala de Richter, en el que llegó una gran cantidad de ayuda de todos los países para atender la emergencia, la enfermedad cobró la vida de 10.000 personas hasta 2019

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