En diálogo con Mañanas Blu, el exministro de Salud Alejandro Gaviria, analizó los recientes cambios en la reforma de salud en Colombia
y entregó detalles de la importancia de un sistema meritocrático en la selección de gerentes de hospitales.
Este es un punto clave en la reforma de salud que se está discutiendo en Colombia
. Gaviria compartió su visión y experiencia respecto a cómo se debería manejar la gestión pública en el sector salud.
La ley 1438, creada en el año 2011, permitió que los gerentes de hospitales de primer y segundo nivel fueran elegidos a través de concursos de méritos, liderados por universidades.
Sin embargo, Gaviria
explicó que este sistema se volvió problemático, convirtiéndose casi en una 'subasta' donde las universidades eran cooptadas por intereses políticos.
Esto llevó a la intervención del Gobierno, que introdujo ciertos criterios mínimos de conocimiento para el nombramiento de gerentes. Gaviria se manifestó favorable a mantener este tipo de supervisión, pero lamentó que, tras acuerdos políticos, se eliminara el artículo mencionado.
En su opinión, para que los hospitales funcionen eficazmente
, se necesita que la política esté menos involucrada en su gestión.
Pese a que existen ejemplos de buena administración, como el Hospital General de Medellín
, también reconoció que la corrupción y el clientelismo siguen siendo problemáticas persistentes.
El exministro dejó claro que no se trata solo de eliminar la política de la gestión hospitalaria, sino de forjar un entorno donde la democracia funcione y la corrupción no tenga cabida.
Por otro lado, aseguró que tal y cómo esta la reforma, el país puede volver a la crisis en salud
que se vivió por cuenta del sistema usado a través del Seguro Social. Reflexionó sobre esta reforma, y aseguró que cree que es peor, porque pareciera que no hubo consenso.
"Yo creo que incluso esta reforma en algunas dimensiones es aún peor porque da la apariencia de una especie de consenso, pero no existe", dijo.
Y agregó, "el papel de la EPS
está ahí como perdido, pero le entregan una gran cantidad de recursos sin sentido. Yo creo que esta es una reforma que sigue siendo inconveniente. Va a llevar a más problemas de atención de los pacientes. Las críticas que yo tenía inicialmente, por ejemplo, el fraccionamiento de la atención se mantiene y las críticas de moverse a un sistema con un pagador único sin haber construido las capacidades que se necesitan. Sin una transición clara se mantiene. Esta es una reforma
que yo sigo creyendo va a traer más problemas financieros, más problemas de atención y más corrupción. La esencia no ha cambiado", finalizó.
Escuche aquí la entrevista: