La protección solar es uno de los cuidados más importantes y esenciales para mantener la salud y la juventud de nuestra piel, independientemente de la edad, el tipo de piel o el clima. La exposición constante y prolongada a los rayos ultravioleta (UV) puede provocar daños que van mucho más allá de una quemadura superficial, y estos efectos pueden acumularse con el tiempo, acelerando el envejecimiento prematuro y aumentando el riesgo de desarrollar enfermedades graves como el cáncer de piel.
A pesar de que en el pasado la protección solar se asociaba principalmente a días de playa o actividades al aire libre, hoy en día sabemos que es vital incorporarla a nuestra rutina diaria de cuidado de la piel. Los rayos UV están presentes incluso en días nublados o fríos, y la exposición a la luz azul de las pantallas electrónicas también contribuye al daño cutáneo.
¿Cómo elegir el protector solar adecuado?
Cuidar la piel del rostro del daño solar es esencial. Hoy en día, pocos conocen que hay una nueva generación de protectores solares que no solo brindan protección, sino que también incluyen beneficios de skincare, fusionando protección solar y tratamiento facial para atender las necesidades específicas de la piel. Suzanne Piqueras, directora corporativa de tratamiento y cuidado personal, comparte unos puntos claves para elegir el protector ideal para el rostro.
- Alta Protección de Amplio Espectro: el SPF (factor de protección solar) es fundamental al elegir un protector, ya que indica el nivel de protección frente a los rayos UVB, los cuales causan quemaduras y daños celulares. Sin embargo, la directora Suzanne Piqueras destaca que es igual de importante que el producto ofrezca protección de amplio espectro.
Este tipo de protección también cubre contra los rayos UVA, los cuales son responsables del envejecimiento prematuro, causante de arrugas, flacidez y manchas.La protección UVA se mide con la clasificación "PA", y el nivel máximo de esta es PA++++, lo que indica una alta resistencia contra los efectos de estos rayos. Además, muchas pantallas solares de nueva generación ofrecen protección contra la luz azul, que emiten tanto el sol como los dispositivos electrónicos. Este aspecto es crucial para prevenir la aparición de manchas y otros signos de envejecimiento que esta luz puede generar. - Textura ligera y absorción rápida: para que el protector solar se convierta en un aliado diario, es esencial que sea cómodo de usar. Las fórmulas de textura ligera y fluida son ideales para el rostro, ya que se absorben rápidamente y no dejan sensación de grasa ni residuos en la piel. Esto permite que el protector solar sea aplicado fácilmente antes del maquillaje y se integre a su rutina diaria sin complicaciones. En palabras de Piqueras, "el protector solar ideal es aquel que se sienta cómodo usando todos los días".
- Beneficios multifuncionales para el cuidado facial: optar por protectores solares que no solo protejan, sino que también nutran su piel, es una gran ventaja. Hoy en día, existen protectores con ingredientes activos de tratamiento facial que brindan beneficios adicionales, como hidratación profunda, efecto antiedad y antioxidante. Ingredientes como el ácido hialurónico (ideal para mantener la piel hidratada y con aspecto fresco) y la vitamina E (con propiedades antioxidantes que combaten los efectos de los radicales libres) son ideales para cuidar la salud y juventud de la piel.
- Fórmulas calmantes para todo tipo de pieles:un buen protector solar debe adaptarse a todo tipo de pieles, incluidas aquellas sensibles. Para las personas con piel delicada, los protectores con ingredientes calmantes son una excelente opción. Ingredientes como el pantenol, el extracto de avena y el aloe vera son conocidos por sus propiedades suavizantes y ayudan a evitar irritaciones. Estas fórmulas permiten que el protector sea tolerado sin problemas y ofrecen un efecto calmante, manteniendo el confort en cada aplicación.
¿Por qué es importante usar protector solar?
Un buen protector solar actúa como una barrera invisible que protege la piel de los efectos dañinos de la radiación solar. Este producto no solo ayuda a prevenir las quemaduras, sino que también protege la estructura interna de la piel, lo cual es fundamental para evitar arrugas, manchas y la pérdida de elasticidad. Existen protectores solares que ofrecen, además, propiedades adicionales de tratamiento, como hidratación, antioxidantes y activos calmantes, adaptándose a las necesidades específicas de cada tipo de piel.