En los municipios de Necoclí y Turbo, en el Urabá antioqueño, hay alerta por 330 migrantes que se encuentran varados en las playas debido a los cierres de frontera.
Estos migrantes, la mayoría provenientes de África, y que se desplazan hasta Centro y Norteamérica, quedaron varados especialmente por el cierre del muelle de Capurganá, paso obligado en su trayectoria.
Desde allí, las autoridades locales alertan que esta aglomeración de migrantes podría convertirse en un foco para la propagación del coronavirus, pues no se sabe en qué otros países han estado.
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“Es una situación que nos tiene altamente preocupados porque aquí versa un tema de salud pública por la pandemia”, dijo el secretario de Gobierno de Necoclí, Jimmy Rivas Palacios.
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También, el secretario le pide a las autoridades sanitarias apoyo para poder atender de manera oportuna a esta población.
En la zona ya hizo presencia el director del Dapard y su equipo de trabajo, que ya adelantan un plan para atender y monitorear permanentemente el estado de salud de estos migrantes.
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