Con una inversión de 1.161 millones de pesos en materiales de construcción, la Unidad Nacional para las Víctimas dio un paso significativo en la reparación integral del corregimiento de Riachuelo, en el municipio de Charalá. Esta entrega, realizada como parte del Plan Integral de Reparación Colectiva (PIRC), beneficiará directamente a unas 1.200 personas de ocho veredas de la región: Centro, La Falda, San Cayetano, La Loma, Santa Rosa, Capellanía, La Chapa y Quebrada Seca.
Durante el evento, Yesid Triana, director territorial Santander de la Unidad para las Víctimas, resaltó la importancia de esta acción como una medida concreta de reparación a las comunidades afectadas por el conflicto armado. “Los recursos están destinados a la ampliación y mejoramiento de los acueductos, garantizando el acceso al agua potable y fortaleciendo la calidad de vida de los habitantes de Riachuelo”, explicó Triana.
El proyecto, cuyo costo total asciende a 1.858 millones de pesos, cuenta además con aportes de 340 millones de pesos por parte de la Alcaldía de Charalá y 356 millones provenientes de la comunidad beneficiada, que contribuirá con mano de obra calificada y transporte de materiales.
Jorge Wilmer Vega Rojas, alcalde de Charalá, destacó la colaboración entre las partes involucradas: “El municipio pone unos recursos por medio de transporte de materiales, de profesionales, de maestros. Estamos en el proceso de contratación y ya, pues, esperando para el inicio de esta gran obra que traerá al corregimiento de Riachuelo un avance bastante significativo en todo lo que tiene que ver con este preciado líquido”, indicó el mandatario local.
Desde la aprobación del Plan Integral de Reparación Colectiva en 2016, la Unidad para las Víctimas ha invertido 628 millones de pesos en la implementación de 19 de las 25 acciones contempladas en las cinco medidas de reparación integral del plan. Según Carlos Alberto Monsalve Mantilla, integrante del sujeto de reparación colectiva: “La implementación de estas acciones refleja un compromiso real con el bienestar de la comunidad, avanzando hacia la reconstrucción del tejido social”.
El corregimiento de Riachuelo, reconocido como sujeto de reparación colectiva, continúa avanzando en su camino hacia la recuperación y el desarrollo, con proyectos que buscan restablecer los derechos de sus habitantes y fortalecer su calidad de vida.