En el marco de la operación Catatumbo, tropas del Ejército Nacional lograron un nuevo golpe en contra de la disidencia del frente 33 de las Farc. La acción se desarrolló en la vereda Bretania, municipio de Tibú en Norte de Santander.
Durante los combates, fue dado de baja un presunto integrante de esta estructura. Además, se logró la desvinculación de dos menores de edad que hacían parte de la estructura y quienes fueron entregados al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar para el restablecimiento de sus derechos.
Paralelo a estas acciones, las tropas sostuvieron combates con integrantes de las disidencias y el ELN en el sector de Campo Yuca, también en el municipio de Tibú. Según se conoció, la acción subversiva puso en riesgo a la población civil.
Desde este lugar, los soldados lograron extraer y brindar atención humanitaria a dos personas heridas producto de los enfrentamientos. Ambas fueron llevadas hasta la ciudad de Cúcuta para recibir atención médica, pero infortunadamente en las últimas horas, Johanna Quiñones, una de las mujeres alcanzada por las balas, murió.
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En esa misma zona, una vez controlada la situación, se recuperaron dos armas largas y tres vehículos. Así mismo, durante el desarrollo de estas operaciones, fueron incautadas cinco armas largas y dos armas cortas, 57 minas antipersonal, munición de diferentes calibres, material de guerra, intendencia y equipos de comunicación pertenecientes al ELN y a la disidencia.
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