Tras 25 días en cautiverio fueron liberados los líderes sociales María Caicedo Osma y Miguel Antonio Quintero, ambos oriundos de la ciudad de Cúcuta y quienes el pasado 27 de agosto se internaron en la vereda Mesa Rica, perteneciente al municipio de La Playa de Belén, en el Catatumbo , para adelantar trabajos sociales con la comunidad.

Ese día fueron interceptados por hombres armados que se los llevaron con rumbo desconocido. Aunque las autoridades no lo confirman, se presume que estuvieron en poder de la guerrilla del ELN que tiene fuerte presencia en esa zona del departamento de Norte de Santander.

Desde ese momento, los organismos defensores en derechos humanos, juntas de acción comunal e instituciones como la Defensoría del Pueblo, trabajaron para lograr que fueran entregados sanos y salvos para retornar al seno de su hogar.

Tras la gestión, se conformó una comisión humanitaria que se internó en el Catatumbo para traerlos de vuelta y entregarlos a sus familiares en la ciudad de Cúcuta.

Rescatan a menor con amenazas de reclutamiento en el Catatumbo

Un vuelo humanitario, realizado en el municipio de Tibú, logró extraer a una menor de 13 años que era víctima de amenazas de reclutamiento, al parecer provenientes de las disidencias de las Farc.

El Ejército Nacional fue el encargado de realizar el operativo que en medio del hermetismo logró que la pequeña junto a su mamá abordara un helicóptero que las sacó del lugar.

El coronel Leonardo Ferreira Lugo, del Ejército Nacional dijo que “de acuerdo con las denuncias, la vida y la integridad de la menor estaban en riesgo, debido a las amenazas y la persecución de reclutamiento forzado por parte de integrantes de grupos armados al margen de la ley que delinquen en esta zona del departamento".

Según contó Ferreira, las dos personas fueron llevabas a un lugar seguro y se continúa adelantando operaciones para evitar que este tipo de hechos ponga en riesgo la vida y la integridad de la comunidad.

La madre de la pequeña denunció que otras menores han desaparecido en las mismas circunstancias y no se ha vuelto a conocer del paradero de las menores, sin embargo, sus familias de no denuncian por miedo a represalias porque se encuentran aún en el territorio.