Luego de tres días de protestas por parte de proveedores locales, se normalizaron las actividades de perforación en el proyecto Yariguí - Cantagallo, en Puerto Wilches. La manifestación, que inició el lunes 11 de marzo, bloqueó el acceso de operarios a la zona y llevó a la suspensión de 15 contratos por parte de Ecopetrol.
El levantamiento del paro fue posible luego de una serie de diálogos en la Alcaldía de Puerto Wilches
, en los que participaron representantes de los proveedores locales, la empresa Halliburton, el alcalde y funcionarios de la Administración Municipal. Como resultado de estas negociaciones, se alcanzó un acuerdo que permitió el restablecimiento de las operaciones.
Ecopetrol
destacó el compromiso de todas las partes involucradas y subrayó la importancia del diálogo como herramienta fundamental para la construcción de consensos que beneficien tanto a las comunidades como a la continuidad de las actividades en la región.
"Reiteramos nuestro compromiso con el desarrollo del territorio y con la generación de oportunidades para los proveedores locales, siempre dentro de un marco de respeto, cooperación y beneficio mutuo", señaló la compañía en un comunicado oficial.
Los proveedores estaban inconformes con las tarifas para el suministro de servicios necesarios para el desarrollo de la actividad, por eso decidieron bloquear el acceso a las operaciones de Halliburton, lo que resultó en la interrupción de las labores en el campo.