Familias en Santander esperaron 6 años para que Minagricultura iniciara proyecto de vivienda rural

El proyecto de construcción de vivienda rural para familias campesinas vulnerables y víctimas del conflicto armado en ocho municipios de Santander, por fin se hizo realidad, pues ya se inició el traslado de materiales para la construcción de 77 casas en los municipios de Curití, San Gil, Charalá, Sabana de Torres, Galán, Rionegro y Simacota.

Se trata de un proyecto del Ministerio de Agricultura y operado por Fiduagraria que tuvo serios inconvenientes para iniciar, pues desde 2018 se hablaba de este, sin que se materializara.

“Se trata de familias campesinas vulnerables y víctimas del conflicto armado, quienes mediante las resoluciones 256 y 262 de 2019 recibieron un subsidio de vivienda después de participar en una convocatoria realizada por el Ministerio, y cuya ejecución debió realizarse en 2020, pero no se materializó porque un contratista irresponsable no ejecutó la obra, se apropió del anticipo entregado y dejó a los beneficiarios esperando”, informó Cristian Beltrán de la veeduría de Curití que realizó acompañamiento voluntario al proyecto de vivienda de interés social.

La construcción de las viviendas iniciará a mediados de marzo de 2024, informó el Ministerio de Agricultura.

“Debido a las demoras presentadas en el proyecto, desde la veeduría se logró la creación una mesa de seguimiento especial encabezada por la Dirección de Bienes Públicos Rurales del Ministerio de Agricultura, en la que participan además el Ministerio de Igualdad y Equidad, Secretaría de Vivienda de Santander, Alcaldías de los municipios beneficiados, Enlace de Víctimas y representantes de los beneficiarios, desde la que se hará monitoreo a la ejecución al proyecto”, señaló la veeduría de Curití.

En agosto de 2021 los beneficiarios del programa habían expresado su preocupación porque veían que el proyecto no se iba a hacer realidad. A algunos les prometieron el mejoramiento de sus viviendas y, en otros casos, viviendas nuevas, sin embargo, no había respuesta por parte de los contratistas del Ministerio de Agricultura.

"Del total de viviendas, 45 iban a ser construidas por el Consorcio Futuro por un contrato que firmó con Fiduagraria S.A como vocera y administradora del patrimonio, en mayo de 2021 en una audiencia por posibles incumplimientos se dio un plazo de entrega del 50% de las viviendas aprobadas antes del 31 de agosto, pero a cuatro días de terminar el mes, no se ha puesto ni una piedra", dijo en su momento Cristian Beltrán, líder social del municipio de Curití y quien ha estado atento al proceso.

Con el anuncio del inicio de la construcción de las viviendas de interés social se abre una luz de esperanza para las familias que desean vivir en una casa propia y bajo condiciones dignas.