Hay alerta por creciente del río de Oro que destruyó algunas viviendas y se llevó los electrodomésticos de varias familias en el norte de Bucaramanga , las cuales en este momento reclaman ayuda de las autoridades.
Con un derecho de petición más de diez familias del asentamiento humano La Playita del norte de Bucaramanga están pidiendo ayuda porque la última creciente del río de Oro que aumentó su caudal debido a las lluvias provocadas por el fenómeno de La Niña terminó destruyendo sus viviendas y llevándose todas sus pertenencias en hechos que, por fortuna, no dejaron personas heridas.
“Estamos en una temporada de lluvia y el río de Oro se crece y empieza a derrumbar los ranchos de las personas que viven en el sector de La Playita el llamado de atención es a la Unidad de Gestión del Riesgo, a la Secretaria del Interior y Gestión del Riesgo para que ayuden con todos los sistemas de alerta temprana y toda la ayuda humanitaria que podamos brindar a las personas que están asentadas en este sector de la ciudad, estamos hablando de seres humanos que están en riesgo”, dijo el Concejal de Bucaramanga, Jorge Flórez.
Teniendo en cuenta que la Unidad de Gestión del Riesgo de Bucaramanga no ha llegado a la zona y no ha entregado ayudas humanitarias a la comunidad afectada en ese sector hasta el momento, los habitantes colocaron sacos de arena de manera improvisada para tratar de evitar que una nueva creciente del río termine generando más emergencias en ese lugar.
Sobre el invierno que viene afectando varios sectores de Santander la Unidad de Gestión del Riesgo explicó a través de sus redes sociales que realiza acompañamiento a las comunidades de Sucre y la Belleza afectadas por fenómeno de remoción en masa en el sector Altamira. “Articularemos la recuperación y el tránsito de nuestros campesinos y productos de la región”, dijo Eduard Sánchez, director del Riesgo de la región.