Claudia Andrade, excandidata a la Alcaldía de Barrancabermeja en las pasadas elecciones regionales, reiteró, luego de una audiencia, su denuncia pública de una presunta manipulación de los resultados de las mismas, que dieron como ganador a Jonathan Vásquez.
Andrade afirmó que denunció desde el primer momento la presunta manipulación de los resultados electorales en la ciudad, que incluso numerosos ciudadanos advirtieron sobre lo que estaba ocurriendo, según ella, “ante la mirada atónica de las autoridades, por no decir que casi sospechosa, (por su) silencio sepulcral”.
"Desde el primer momento en que denuncié la situación, me consideré víctima de este proceso", afirmó Andrade. Aunque no es abogada en derecho penal, explicó que el concepto de víctima puede referirse tanto a quienes sufren daño directo como indirecto. En su opinión, "la verdadera víctima es la población de Barrancabermeja, engañada y afectada en su derecho a una democracia transparente". Andrade también se considera una víctima indirecta por su participación en el proceso electoral, en virtud del derecho constitucional a elegir y ser elegida.
La Fiscalía General de la Nación ha comenzado a investigar las denuncias, y el imputado Jonathan Vásquez, actual alcalde de Barrancabermeja, está acusado de tergiversar los resultados electorales junto con otras personas. Sin embargo, la Fiscalía tiene la responsabilidad de investigar y presentar pruebas ante un juez para aclarar lo sucedido en las elecciones.
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Andrade aclaró que el cuestionamiento no se centra en si el actual alcalde ganó o cómo lo hizo, sino en la posible compra de votos: "Lo que esperamos muchos ciudadanos es que se aclare la posible compra de votos", enfatizó.
Jonathan Vásquez, por su parte, respondió a las acusaciones con un video en el que denuncia lo que él considera un montaje político. Según Vásquez, la imputación en su contra, que tuvo lugar el viernes pasado, no le permitió refutar las acusaciones en ese momento. El alcalde sostiene que las acusaciones están basadas en mentiras y manipulaciones, y que la fiscalía ha sido inducida a error por quienes lideran una persecución política en su contra. Vásquez expresó su confianza en la imparcialidad del sistema judicial y en que el proceso se llevará a cabo con justicia.
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Mientras espera la próxima audiencia, Vásquez continúa ejerciendo su cargo como alcalde. La comunidad local y los seguidores del mandatario están atentos a los desarrollos del caso, que ha generado un intenso debate público sobre las posibles motivaciones políticas detrás de las acusaciones.
En una reciente audiencia, el fiscal anticorrupción número 74, Joseph Berdugo, presentó cargos contra el alcalde Jonathan Vásquez, el concejal Ariel de Jesús Zambrano González, y el hermano del alcalde, Maycol Brandon Vásquez Gómez. Los cargos incluyen presuntos delitos de corrupción electoral, concierto agravado, corrupción al sufragante en concurso homogéneo y sucesivo, y constreñimiento al elector.
El fiscal Berdugo alegó que los habitantes del barrio Villa María fueron coaccionados para apoyar a Vásquez bajo amenazas de desalojo y otras presiones. Los acusados enfrentan penas que varían entre 48 y 108 meses de prisión. El fiscal describió a los imputados como parte de una "organización criminal" que había formado un "pacto criminal" para cometer estos delitos.
A pesar de las graves acusaciones, ni el alcalde Jonathan Vásquez ni el concejal Zambrano ni el hermano del alcalde, Maycol Brandon Vásquez, han aceptado los cargos.
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