Entregan 2.000 ayudas humanitarias a familias afectadas por lluvias en Santander

En un acto liderado por Alfonso Pinto Fratalli, asesor premium de la Federación Nacional de Departamentos (FND), y en articulación con la Gobernación de Santander y el Ejército Nacional, se oficializó la entrega de 2.000 ayudas humanitarias destinadas a familias afectadas por las adversidades climáticas en el departamento.El paquete de asistencia incluye 1.000 kits alimentarios y 1.000 kits de aseo, que serán distribuidos por la Unidad Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres (UDGRD) en municipios como San Vicente de Chucurí, Puerto Wilches, Sabana de Torres y El Carmen de Chucurí. Estas localidades han sido identificadas como las más afectadas por los recientes fenómenos climáticos y están en el foco de atención de las autoridades departamentales y nacionales.“Estas ayudas buscan ser un alivio para las muchas familias santandereanas que están atravesando momentos difíciles debido a las condiciones climáticas adversas de los últimos meses”, afirmó Alfonso Pinto Fratalli. Asimismo, enfatizó que estas acciones son posibles gracias al trabajo articulado entre la Federación Nacional de Departamentos, la Gobernación de Santander y el apoyo logístico del Ejército Nacional.Durante la jornada de entrega se llevó a cabo una exhaustiva verificación de los contenidos de los kits, asegurando que cumplieran con los estándares necesarios para atender las necesidades básicas de las familias beneficiadas.De acuerdo con la información, las ayudas quedaron en posesión de la Unidad Departamental de Gestión del Riesgo de Santander, y será la Gobernación la encargada de realizar el proceso de tamizaje y priorización para garantizar que las ayudas lleguen a quienes más las necesitan. Pinto Fratalli destacó la importancia de esta fase, afirmando: “Confiamos en que el tamizaje del Departamento permitirá distribuir estas ayudas de manera eficiente y justa, llegando a las personas y comunidades más afectadas”.Con estas ayudas, las autoridades esperan brindar un respiro a las familias afectadas, al tiempo que se preparan para posibles eventos climáticos futuros.