A través de un comunicado, la Arquidiócesis de Cali manifestó su gran preocupación ante los hechos de violencia que se han registrado en los últimos días, no sólo en los municipios de Jamundí y Dagua, los cuales son vecinos de la capital del Valle, sino también en el norte del departamento del Cauca.
Ante esta oleada de acciones violentas en el suroccidente del país, la Iglesia Católica le ha pedido al Gobierno nacional y a las autoridades locales, tomar medidas que garanticen el bienestar de las comunidades.
"Nos preocupa el sentimiento de frustración, temor, desconfianza y desesperanza en buena parte de la población y pedimos al Gobierno nacional, regional y locales acciones concretas orientadas a la resolución de los graves problemas que tenemos, que son también causas de la inestabilidad general e institucional que se percibe", señala el documento.
En el texto, la Iglesia reitera su llamado al respeto a la vida y a la dignidad humana, pidiendo la búsqueda de soluciones que conlleven una convivencia pacífica y fraterna, para lograr el normal desarrollo de las comunidades.
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En el comunicado también se anuncia que el domingo, 2 de junio, diferentes parroquias e Iglesias de Cali, Jamundí, Dagua, La Cumbre y Yumbo, adelantarán procesiones y recorridos por las calles, realizando una oración solicitando el don de la paz y la reconciliación.