A pesar de que la ley del silencio reina en la zona rural de Tumaco, Blu Radio habló con un habitante del puerto nariñense de donde eran oriundos tres de los nueve colombianos asesinados en Ecuador , y dijo que los tres jóvenes “habían sido contratados para un trabajo en Brasil" y, por tal motivo, aseguró desconocer "por qué estaban en la frontera entre Ecuador y Perú”.
Según se conoció, Maicol Yesid Cortez, de 28 años; Joseph Lisandro Preciado Portilla, de 23 años; y Samuel Antonio Cárdenas, de 22 años, partieron de la vereda La Espriella en Tumaco el pasado 23 de noviembre con rumbo a Brasil, donde aseguraron que tendrían una mejor calidad de vida, ya que en Tumaco estaban cansados de buscar trabajo.
En diálogo exclusivo con Blu Radio, el representante de la comunidad dice que las familias de los tres jóvenes mencionados tienen mucho miedo, porque aseguran haber recibido llamadas en las que los intimidan y, por eso, prefieren no hablar para no poner en riesgo sus vidas.
Aseguró que los tres jóvenes estaban muy contentos porque habían conseguido trabajo en agricultura y manifestaron que viajaban para conseguir recursos y poder sacar a sus hijos adelante, ya que en la vereda donde se encontraban, en la zona rural de Tumaco, no conseguían nada legal, y solo les tocaba cultivar o recoger hoja de coca, dijo el vocero comunitario.
"No hay mayor información, porque las autoridades de Ecuador los hicieron pasar a todos como integrantes de grupos ilegales, pero estamos seguros de que Maicol, Joseph y Samuel nada tenían que ver con esas estructuras delincuenciales que menciona la policía de Ecuador", señaló el representante de la comunidad.
"Son familias muy pobres que piden el apoyo de la Cancillería de Colombia para repatriar los cuerpos de sus seres queridos y darles santa sepultura en la zona rural de Tumaco, de donde eran oriundos", dijo el portavoz local.
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Mientras tanto, el secretario de Gobierno del departamento, Benildo Estupiñán, dijo a Blu Radio que ya se están haciendo los trámites ante la Cancillería de los dos países para lograr repatriar los cuerpos de los jóvenes oriundos de la zona rural de Tumaco.
"Es una situación muy compleja porque no hay mayor información sobre lo que realmente estaban haciendo estas personas en esa provincia de Ecuador, y ya solicitamos a las autoridades del vecino país, a través de la embajada, un informe completo de los móviles que produjeron esa masacre", señaló el funcionario.
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Estupiñán aclaró que, de acuerdo con versiones de medios ecuatorianos, las autoridades del vecino país investigan la relación de la aparición de un panfleto encontrado muy cerca del lugar donde ocurrió la masacre, en la parroquia Barbones del cantón El Guabo, donde se podía leer que esta masacre, al parecer, se dio por la disputa de territorio entre grupos de delincuencia organizada que tienen presencia en esa zona de Ecuador, frontera con Perú.