Blu Radio conoció que, tras una prolongada reunión que se cumplió en las montañas de Nariño entre el 29 de abril y el 5 de mayo, comandantes de las compañías que conforman el frente comuneros del sur decidieron, de manera unánime, romper relaciones con el comando central y la dirección nacional de la guerrilla del ELN por considerar que no aceptarán el trato de agresión y el actual modelo de conducción desde el exilio político.
Este comunicado se da solo doce horas después que la delegación del ELN en los diálogos de paz con el Gobierno nacional anunciara que ponen punto final al acuerdo de diciembre 2023 de no realizar secuestros con fines políticos.
Los guerrilleros y comandantes dicen que se mantienen en la construcción de paz territorial para lo cual cumplirán con acciones concretas como es el desminado humanitario, cuyo protocolo ya está firmado con el Gobierno nacional a través de la oficina del Alto Comisionado para la Paz y que inicialmente beneficiará a los habitantes de la zona rural de los municipios de Santa Cruz de Guachaves, Samaniego y la Llanada, entre otros.
Aseguran que mantendrán un proceso de negociación política entre el frente comuneros el sur y el Gobierno nacional, bajo el proyecto de paz total del actual presidente, Gustavo Petro.
Además, piden a la sociedad colombiana y nariñense que participen en las iniciativas de paz en los territorios que lleve a las organizaciones alzadas en armas desde la solución política a la superación del conflicto, caduco y fratricida.
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Dice el comunicado que la decisión de apartarse del COCE se tomó tras una larga semana de la asamblea del frente comuneros del sur que reunió a los guerrilleros de las compañías de tropas especiales comandante Jacob Acuña, compañías suburbana Jaime Toño Obando, Helder Santos, Guerreros del Sindagua y José Luis Cabrera.
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