Carmen y su esposo jamás pensaron que visitar un lote que iban a comprar para construir su vivienda localizado por uno de los caminos veredales que utilizaban todos los días para salir a realizar sus faenas de agricultura estuviera a punto de acabar con sus vidas.
La pareja de esposos se salvó de morir luego de que por accidente pisaran un artefacto explosivo de fabricación casera en hechos que se produjeron en el sector del Alto Mira y Frontera, zona rural de Tumaco en el pacífico nariñense.
El coronel Juan Carlos Usamag, comandante de la Fuerza de Despliegue Rápido número 5, dijo a Blu Radio, que gracias a la oportuna reacción de un pelotón que estaba en el Km 115 Alto Mira y frontera, fueron alertados sobre los hechos ocurridos y de inmediato un enfermero de combate brindo los primeros auxilios a la mujer y su acompañante quienes terminaron con heridas leves en distintas partes del cuerpo.
El oficial aseguró que las dos personas lesionadas fueron evacuadas de la zona y trasladadas al hospital San Andrés de Tumaco en donde recibieron atención y según el último parte médico se encuentran fuera de peligro.
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Usamag, mencionó que en la zona del Alto Mira y frontera que comprende más de 33 veredas muy cerca de los límites fronterizos con el Ecuador la fuerza pública arriesgando sus propias vidas ha desactivado de manera controlada decenas de artefactos explosivos de fabricación casera que representaban un verdadero peligro para la comunidad campesina que debe transitar por caminos veredales.
“Muchos de estos artefactos hechizos fueron localizados muy cerca de escuelas que pone en riesgo la vida de los niños, niñas, adolescentes y docentes, violando el derecho internacional humanitario”, dijo el oficial.
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Jair Mena, defensor del Pueblo región pacifico aseguró que el año pasado, la Defensoría del Pueblo expidió varias alertas en donde se puso de manifiesto la utilización de estos artefactos no convencionales y se logró registrar más de diez casos de personas heridas tras caer en los campos minados.
Por otra parte, campesinos de la zona que pidieron no revelar su identidad ni la vereda donde residen, indicaron que la utilización de las minas antipersonal es una plática muy vieja en esa zona donde las extintas Farc también minaban los caminos para impedir el paso de las fuerza pública y aseguraron que estos campos minados son un riesgo porque no se saben dónde están ni mucho menos hay un mapeo que permita que estos artefactos sean desactivados de manera controlada.
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