Con la intervención en menos de 24 horas de la Superintendencia de Salud a dos de las EPS con mayor número de afiliados en el departamento, la gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro señaló su preocupación ante esta medida, y las afectaciones que esto acarrearía a la red pública de salud.
Según la mandataria, si bien la Superintendencia tiene sus causales para adelantar estas intervenciones, la solución a las falencias del sistema de salud no es esta medida sino una modificación estructural, específicamente en la financiación.
"Aquí en el Valle tenemos una situación gravísima porque las EPS que están intervenidas, que están a cargo de la Supersalud, no les pagan a los hospitales de acuerdo como está establecido en la ley. Vamos a esperar ahora que se intervino a Sanitas, a la Nueva EPS, que además tenemos intervenidas a Emssanar y Asmed Salud, vamos a ver si la Superintendencia que está a cargo de les paga a los hospitales los servicios que les prestan a los pacientes”, señaló la mandataria.
La gobernadora del Valle añadió que aunque estas intervenciones afectan el flujo de recursos para las instituciones prestadoras de salud, la atención a los usuarios, de momento, no se vería afectada.
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“Van a seguir siendo atendidos, pero por supuesto es todo también va a depender del pago oportuno que realice la Superintendencia ahora que es la que está en cabeza de las EPS intervenidas”, recalcó.
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