El presidente de Supergiros, Edgar Páez, realizó un recorrido por Atlántico y Bolívar y, en compañía de sus colaboradores, se encargó personalmente de reabrir muchos de los puntos de atención que habían sido cerrados en estos departamentos por el asedio del Clan del Golfo durante los últimos 26 días.
Páez dialogó con las colocadoras y clientes que regresaron a estos locales y los animó a hacer uso de esta red de servicios, no sin antes hacer un llamado a la institucionalidad para que brinde acompañamiento a esta empresa, la cual ha sido blanco de múltiples ataques y amenazas.
"Vamos a pasar una Navidad llena de esperanza y positivismo", dijo Páez, rodeado de un gran equipo que lo acompañó por Barranquila y Cartagena.
De esta manera, la empresa Supergiros empezó a normalizar su operación, tras las afectaciones que empezó a sufrir desde el pasado 4 de noviembre, cuando hombres armados ordenaron el cierre de más de 3.000 puntos de atención en cinco departamentos del Caribe.
"Supergiros está acá, se va a quedar acá y está en el futuro de todos. Vamos a terminar este año haciendo mas grande a Supergiros, porque es el trabajo de todos nosotros, entonces los invito para que abran todo los puntos que faltan, vamos para adelante", les dijo Páez a las trabajadoras.
Como consecuencia de los atentados a bala cometidos recientemente contra los locales de Supergiros, una trabajadora murió en Cesar y otra quedó gravemente herida en Atlántico. Ambas fueron atacadas en sus puestos de trabajo.