Los ojos de Colombia siguen puestos en la reciente masacre que se registró en Aguachica , Cesar, por lo que las autoridades civiles de esa jurisdicción, la Fiscalía y la Policía tendrán este viernes un segundo consejo de seguridad para verificar los avances que se han tenido en las investigaciones.
Aunque las pesquisas se manejan con cautela, en la cita se hablará de las hipótesis que fueron desestimadas en los últimos días y el abandono del territorio que han tenido varios líderes religiosos a causa del incremento de las extorsiones .
La pastora Lyda Elena Arias, presidenta de la Confederación Evangélica de Colombia, sostuvo en conversación con Blu radio que hay amenazas contra muchos líderes religiosos en los últimos días.
“Sí, hemos recibido muchas voces de preocupación de nuestros líderes religiosos. Muchos de ellos han sido amenazados, pero están firmes en perdonar y ayudar. Dentro de ellos muchas veces hay voces que les recuerdan el temor de no estar seguros, por lo que algunos se han marchado del territorio”, declaró la pastora Lyda Elena.
Arias mencionó que también hay varios casos que no eran conocidos y tras la masacre salieron a la luz. Se lleva a cabo un acompañamiento junto con las autoridades.
Clan del Golfo
Desde la Gobernación del Cesar y los altos mandos de la Policía Nacional esperan pronta respuesta acerca de los responsables del hecho, por lo que Blu Radio conoció que hasta el momento no se descarta la posible responsabilidad del Clan del Golfo, pese a los rumores de un supuesto comunicado en el que ellos mismos afirman lo contrario.
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Además, fuentes judiciales indicaron a Blu Radio que la Policía ha asesorado más de 50 casos de llamadas tipo carcelario que se hicieron teniendo como mecanismo de presión la muerte de los pastores.
Las versiones que apuntaban a una confusión o amenazas de extorsión contra la familia fueron descartadas, mientras que es materia de estudio la relación que tenía el pastor Marlon Lora con Alexánder González, alias El Calvo, quien apareció muerto dos días antes de la masacre en El Banco, Magdalena.
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Las personas a cargo del caso habrían encontrado comunicaciones telefónicas entre ambos, por lo que ahora todo parece tomar rumbo hacia un presunto ajuste de cuentas o hasta problemas derivados de deudas económicas.