La Alcaldía de Santa Marta, a través de la Secretaría de Salud Distrital, tomó la decisión de extender la alerta amarilla hospitalaria hasta el próximo 15 de julio con el propósito de atender las posibles emergencias que se puedan registrar ante los efector del fenómeno de La Niña y el paso del huracán Beryl que genera amenaza en la región Caribe.
A través de un comunicado de prensa, el Distrito explicó las razones de esta decisión.
“El origen de esta alerta se remonta a la resolución 005, firmada el 14 de junio de este año, que estableció una alerta amarilla, debido a los efectos de La Niña . Inicialmente, esta medida debía finalizar el 30 de junio. Sin embargo, ante la previsión de más fenómenos meteorológicos adversos, la resolución 006 del 30 de junio extendió la alerta hasta mediados de julio”, se lee en el comunicado.
De igual forma, la autoridad de salud agregó la importancia de la prevención y la atención oportuna en estos casos.
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“Todas las IPS y EPS de Santa Marta deben estar listas para responder a las emergencias”, mencionó el boletín de prensa.
El impacto climático no solo amenaza la infraestructura sanitaria, sino también la seguridad de los ciudadanos de Santa Marta. Por esta razón, es crucial establecer protocolos de contingencia que garanticen la prestación ininterrumpida de los servicios de salud.
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Finalmente, la Secretaría de Salud hizo un enfático llamado a toda la comunidad para que permanezca atenta a las actualizaciones y siga rigurosamente las instrucciones emitidas por las autoridades oficiales. Mantenerse bien informados y actuar de acuerdo con las recomendaciones oficiales son pasos cruciales para reducir al mínimo los posibles daños y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.
La secretaría destacó la importancia vital de la prevención y la preparación para enfrentar cualquier eventualidad relacionada con el huracán Beryl. Subrayaron que la colaboración de la comunidad es esencial para mitigar los efectos adversos que el huracán pueda traer consigo, haciendo hincapié en que la prevención y la preparación son fundamentales para minimizar los daños potenciales.