Desde la dirección de la Unidad Administrativa de Servicios Públicos de Bogotá, UEASP, desmintieron los rumores de posibles deslizamientos en el domo del relleno sanitario Doña Juana, después de conocerse un estudio que advertía del posible riesgo.
Consuelo Ordóñez, directora de la entidad, afirma que los datos que fueron tomados para el estudio, hacen referencia a situaciones que se presentaron durante el 2020 y que actualmente el operador y la interventoría que vigila el relleno han evidenciado que no hay posibilidad de estos riesgos.
Sin embargo la entidad resaltó que el domo, o montaña actual de residuos, tendría una vida útil de aproximadamente dos años más, pero que ya se adelantan los estudios técnicos y ambientales con la Corporación Autónoma Regional, CAR, para aprobar la apertura de una nueva celda donde se inicie el proceso de compactación de las basuras.
Al cerrar esta celda esperan hacer la recomposición vegetal para mitigar los impactos ambientales que se generan en este proceso de compactación de las basuras.
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A pesar de estar a la espera del visto bueno de la CAR, desde la unidad confían en recibir la viabilidad del proyecto.
El actual Plan de Desarrollo de Bogotá plantea en una de sus estrategias fomentar la cultura de reutilización de residuos, con la que buscan reducir en un 20 % los desechos que llegan hasta Doña Juana y así poder ampliar la vida útil del relleno.
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