En un nuevo caso de intento de feminicidio,Lina Suarez, una mujer valiente de treinta años, contó la macabra experiencia que ninguna mujer debería pasar. Sobrevivir a un intento de feminicidio es algo milagroso en medio de una sociedad colombiana que cada vez registra más casos de este tipo.
La mujer, que fue baleada seis veces por su expareja, según cuenta, denunció la falta de atención y apoyo de las autoridades, pues, pese a que recorrió todas las instancias buscando justicia y protección, no hicieron nada para evitar su ataque, según informe de Noticias Caracol.
Desde el primer momento, Lina buscó ayuda en las autoridades. Se acercó a la Casa de Justicia y posteriormente a la comisaría de familia, pero a pesar de las promesas de acompañamiento y protección, nunca recibió ninguna atención efectiva. Llamó a la Línea Púrpura, la Línea de la Mujer, pero lamentablemente, no recibió la ayuda necesaria.
Me acerqué a la casa de Justicia, de ahí me mandaron para la comisaría de familia. Me dijeron que me iban a hacer acompañamiento ellos por parte de la Policía que él no se podía acercar a mí, pero aun así nunca pasó
Publicidad
Y agregó, "Yo llamé de línea Púrpura. La línea de la Mujer, pero pues en sí nunca pasó nada hasta el momento de los hechos. Entonces, cuando pasó sí todos empezaron a llamar. La Policía empezó a hacer rondas, Pero ¿ya para qué?".
Durante el lamentable incidente, Lina tuvo que abandonar su hogar, amenazada y con temor por su vida. A pesar de cambiar de casa y números telefónicos, las amenazas persisten. La policía, encargada de su protección, tampoco ha cumplido con su deber de hacer las rondas necesarias.
Publicidad
Sigue amenazada
Además de las heridas físicas y emocionales que sufrió, Lina necesita atención médica especializada. Sin embargo, ha enfrentado dificultades para recibir la atención adecuada por parte de la EPS. Su situación es urgente y requiere de la solidaridad y apoyo de todos nosotros.
"Nosotros estamos fuertemente amenazados, nos tocó cambiar de casa, cambiar de teléfonos, pero aún así siguen las amenazas. Y por parte de la Policía se supone que tenían que hacer rondas, pero tampoco las están haciendo. No se sabe si puedo volver a caminar y ahorita estoy necesitando ayuda por parte de la EPS que también ha sido complicada la atención", contó.
Con este testimonio, Lina Suárez alzó la voz para exigir justicia y atención y hoy no solo busca que se haga justicia en su caso, sino que también busca generar conciencia sobre la violencia de género y la falta de atención hacia las víctimas.
Su desgarradora historia dejó entrever los largos procesos y todas las instancias que debe recorrer una mujer para que sus denuncias sean tenidas en cuenta y, en algunos casos, la atención nunca llega o lo hace, pero demasiado tarde.
Publicidad
Publicidad
Únase a nuestro canal de Whatsapp y manténgase al tanto de los hechos más relevantes.
✔️ Síganos en Google Noticias con toda la información de Colombia y el mundo.