
Así quedó el viaducto del kilómetro 58 de la vía Bogotá - Villavicencio
Ante la preocupación por los constantes deslizamientos en la zona, el director del Invías aseguró que la obra está diseñada para mitigar estos riesgos.

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El nuevo viaducto del kilómetro 58 en la vía Bogotá - Villavicencio ya está en funcionamiento. Con una longitud de 720 metros y una estructura diseñada para resistir las complejas condiciones geológicas y climáticas del sector, esta obra es un paso fundamental para garantizar la estabilidad de la carretera.
Juan Carlos Montenegro, director del Instituto Nacional de Vías (Invías), en diálogo con Blu Radio, destacó la importancia de este proyecto.
"Es un gran trabajo de ingeniería para mostrar los avances que tenemos y el cumplimiento de compromisos", afirmó.
El viaducto se compone de seis apoyos, dos estribos y cuatro pilas que aseguran su estabilidad. Sus tres luces centrales de 180 metros y dos adicionales de 90 metros están diseñadas estratégicamente para mejorar la visibilidad, incluso en condiciones climáticas adversas.
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Ante la preocupación por los constantes deslizamientos en la zona, Montenegro aseguró que la obra está diseñada para mitigar estos riesgos.
"Este viaducto lo que hizo precisamente fue alejar el sentido de circulación de los vehículos de la montaña. Cualquier eventual deslizamiento que ocurra en la ladera no afectará la estructura", explicó. Además, la altura del viaducto lo protege de las crecidas del río Negro, lo que reduce la posibilidad de bloqueos en la vía.
Durante su construcción, el viaducto generó 1.653 empleos, impulsando la economía local y brindando oportunidades laborales en la región.
"Esta obra dinamizó la economía y apalancó el desarrollo laboral, lo que es clave para la reactivación de la zona", indicó el director de Invías.
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Además, la seguridad y confiabilidad de la vía favorecerán el comercio y el turismo en los Llanos Orientales, pues el riesgo de cierres por deslizamientos disminuirá significativamente.
Si bien la inauguración del viaducto es una gran noticia, aún quedan pendientes algunas obras complementarias. Montenegro informó que la construcción del retorno hacia Villavicencio, así como otras labores menores como la señalización y empradización, estarán listas el 28 de febrero.
"Nos falta la mitad del retorno porque era la zona donde transitaban los vehículos hasta ayer. Ya el contratista está ejecutando las labores para finalizar esta condición", explicó.
Respecto a las dudas sobre la pendiente del viaducto, Montenegro aclaró que su inclinación del 10 % es consistente con la geografía del sector y las normas de circulación. Además, la carretera antigua que corría junto a la montaña ha sido cerrada definitivamente para eliminar los riesgos de caída de material sobre la vía.
Aunque la obra no reduce significativamente los tiempos de viaje, sí garantiza una movilidad más segura y sin interrupciones.
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"No se trata de velocidad, sino de estabilidad. Con esta infraestructura, los usuarios ya no estarán expuestos a los riesgos de la montaña, lo que mejora la seguridad vial", puntualizó Montenegro.
El viaducto, con un carril por sentido, permite la circulación en ambas direcciones entre Bogotá y Villavicencio. Su diseño y ubicación aseguran que los deslizamientos y crecientes del río Negro no afecten la conectividad.
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