La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas (UBPD) de Colombia anunciaron que encontraron los primeros restos humanos en La Escombrera de Medellín, la que se considera la fosa común urbana más grande del país, tras años de búsqueda de desaparecidos durante el conflicto armado vivido entre 2001 y 2004 en el sector de la Comuna 13.
"Fueron halladas las primeras estructuras óseas que podrían corresponder a personas desaparecidas en el marco del contexto del conflicto armado en La escombrera de la comuna 13 de Medellín", confirmaron ambas entidades en un comunicado conjunto.
Durante décadas, familiares de desaparecidos han insistido en la necesidad de intervenir este lugar y "hoy, sus peticiones encuentran una respuesta concreta": "Se trata de un logro sin precedentes, una respuesta institucional a sus demandas y una protección tangible de los derechos de las víctimas en Colombia", celebraron la JEP y la UBPD.
Los hallazgos ocurrieron mientras el equipo técnico removía la tierra con maquinaria para garantizar la estabilidad del terreno en el área donde se desarrolla la intervención en La Escombrera, y de inmediato las labores con maquinaria fueron suspendidas y los forenses analizaron lo encontrado.
En diálogo con Mañanas Blu, la abogada Adriana Arboleda de la Corporación Jurídica Libertad, quien durante décadas ha acompañado a Víctimas de desaparición forzada de la comuna 13.
Adriana Arboleda, abogada de la Corporación Jurídica Libertad, habló sobre el impacto del hallazgo de restos humanos en la escombrera de Medellín, 22 años después de la desaparición de miles de personas.
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Este avance es un paso importante hacia la verdad y la justicia para las familias de las víctimas que han estado luchando por respuestas durante años. La abogada destaca también el papel de la empresa constructora El Cóndor y la necesidad de investigar su implicación en estos crímenes.
"Es fundamental porque en un país que sigue negando los crímenes, el hallazgo permite entender que, si continuamos en la búsqueda, los resultados serán posibles", afirmó la abogada.
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Arboleda compartió que existe una base de datos consolidada que contabiliza a 502 víctimas en la comuna 13, y estimaciones de paramilitares sugieren que podrían haber sido arrojados alrededor de 50 cuerpos en la escombrera.
Este escenario refleja el panorama de negación e impunidad que ha rodeado a estos casos durante años.
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Durante la conversación, la abogada también mencionó a El Cóndor, una constructora que ha estado vinculada a la explotación de la zona donde se encuentra la escombrera.
La necesidad de investigar las posibles complicidades de esta empresa en los crímenes ha sido una demanda constante de las familias y de organizaciones de derechos humanos, según señaló Arboleda.
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"Aquí ha prevalecido el interés económico sobre los derechos de las víctimas. La comunidad sabe lo que ocurrió, y es crucial que se reconozca en la memoria social, ya que esa es la base para que no se repitan estos hechos", enfatizó.
Escuche aquí la entrevista:
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