Mala hora para la tradicional textilera Fabricato . Al tiempo que empleados reclaman el pago de prestaciones, la compañía reportó un 28% de disminución en sus ingresos durante los primero nueve meses del año, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
En medio de su proceso de reorganización, anunciado desde julio pasado, Fabricato sigue sin alcanzar los resultados esperados y a las dificultades financieras y propias del mercado, se suman los reclamos de algunos de sus trabajadores.
En la última semana, trabajadores sindicalizados llevaron a cabo un plantón exigiendo el pago de prestaciones, pero, además, lo que denominaron como abusos laborales.
Entre las problemáticas más complejas están los retrasos en salarios, primas, retiros voluntarios que terminan siendo desfavorables para los empleados e incumplimientos en pactos colectivos.
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Estas denuncias contrastan con el reciente informe trimestral que reportó la empresa ante la Superintendencia Financiera, donde se destaca un caída de hasta el 28% en sus ingresos durante el periodo enero-septiembre de este año.
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Fabricato pasó de percibir más de 277.000 millones de pesos durante ese mismo periodo de 2023 a 198.600 millones este año.
“Registra una pérdida como consecuencia de un mercado textil con una demanda contraída tanto a nivel nacional como internacional, sin embargo, la compañía se mantiene optimista en la medida que ejecuta estrategias en innovación de producto, economía circular y optimización de procesos que ayudan a mejorar su competitividad”, señaló la empresa en el balance.
Otro de los factores explican ese comportamiento, advierte el documento, es el contrabando que sigue afectando las ventas.
“Ingresan ilegalmente al país telas que se ofrecen en el mercado a precios que no cubren siquiera el costo de las materias primas de los productos nacionales, lo que sigue afectando directamente las ventas, que para el tercer trimestre presentaron una disminución del 25% en volumen y 13% en valor frente al segundo trimestre del 2024, lo que continúa afectando el capital de trabajo”, argumentaron.
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A pesar de esta situación indicaron que siguen en la búsqueda de un acuerdo bajo el marco de la ley 1116 o de insolvencia, que pretende reestructurar sus operaciones para normalizar tanto los flujos comerciales como los crediticios. Durante todo 2023 la empresa, con más de un siglo de existencia, arrojó pérdidas por más de 122.000 millones de pesos.