Históricamente la temporada de Semana Santa es uno de los momentos a lo largo del año donde se incrementa el tráfico de fauna y flora silvestre, situación que también pone en alerta a las autoridades para reforzar sus controles.
Y es que al notar la presencia de la policía un hombre huyó abandonando un costal en el que llevaba 30 cangrejos azules en el municipio de Turbo, Urabá antioqueño.
Estos cangrejos, con una alta demanda en la alimentación de habitantes de la zona por estos días, fueron dejados a disposición de la autoridad ambiental Corpourabá y posteriormente liberados en su hábitat natural.
Al ser declarada como una especie en vía de extinción, las personas halladas responsables de comercializar estos animales podrían ser puestas a disposición de la Fiscalía por el delito de aprovechamiento ilícito de recursos naturales.