Propietarios del helipuerto donde una aeronave se precipitó en en el barrio Manrique de Medellín aseguraron que cumplen con toda reglamentación y desde el primer momento han respondido a los afectados. Aerocivil visitó el lugar
Tras el aparatoso accidente donde un helicóptero de turismo perdió el control segundos después de despegar de un helipuerto en el nororiente de Medellín, operadores y propietarios del proyecto que también incluye un restaurante en el barrio Manrique se pronunciaron tras lo ocurrido.
Desde el Grupo Santa Débora, como operador del lugar, manifestaron que este cumple con toda la reglamentación de las autoridades para operar y que además han respondido a los afectados y sus familias frente a las pólizas que cubren atenciones médicas. Al respecto Carlos Callejas, asesor jurídico del grupo.
"Empresas de aviación como el local cuentan con un plan de atención de emergencias se activa hay unos protocolos se atienden a las víctimas la aseguradora entra a acompañar en lo que respecta la atención y a futuro si es necesario indemnizaciones pero la aseguradora propietario del propietario de la Aeronave", indicó Carlos Callejas, asesor jurídico del grupo.
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No obstante, implicados en el accidente manifestaron que la atención no fue totalmente oportuna y que solo casi 12 horas después Jaime Andrés Ardila, la única persona que registró lesiones de gravedad apenas, fue atendido a través de las pólizas.
Leonardo Villa, familiar de Jaime y su asesor jurídico, indicó a Blu Radio que otras dos mujeres de nacionalidad costarricense que acompañaban a su cliente tampoco recibieron la valoración médica oportuna y su cuenta fue pagada de manera particular.
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"La atención fue muy precaria a una de ellas, solo le realizaron una radiografía de rodilla y a la otra solo le hicieron una observación física, no le mandaron ninguna ayuda diagnóstica para el acontecimiento como fue ese accidente se requiere un estudio de una valoración más exhaustiva", afirmó.
Frente a inconformidades de la comunidad acerca de la operación de este helipuerto en una zona tan poblada y con algunos factores de riesgo, Daniel Castaño, gerente del Grupo Santa Débora afirmó que han recibido varias quejas de vecinos, especialmente frente al ruido de las aeronaves, sin embargo, aclaró que han hecho las cosas conforme a la ley.
"Obviamente hemos recibido quejas menores. Es venga la gente no entiende que nosotros nos levantamos a tal hora que trabajamos de noche, que nos están levantando una teja, pero obviamente también siempre nos hemos respaldado de que las cosas hicieron bien de que todos los estudios se realizaron de que los estudios de afectación nos indican que no hay ningún problema", explicó.
Sobre las causas de lo ocurrido aún no hay un reporte oficial o claro, pero en la tarde de este martes una comisión de la Aeronáutica Civil estuvo en lugar continuando con las inspecciones que permitan aclarar qué fue lo que sucedió. Hasta tanto las operaciones en el helipuerto están suspendidas.