El hallazgo de tres hipopótamos muertos, dos de ellos en los últimos meses, a orillas del río Magdalena, ha generado inquietud en varias comunidades de la subregión del Magdalena Medio antioqueño donde habita esta especie declarada como invasora por el Ministerio de Ambiente desde el 2022.
Aunque se trate de animales que han puesto en peligro con su presencia varios factores del ecosistema e incluso a habitantes de la zona, organizaciones como la Comisión Protectora de la Vida de los Hipopótamos, asegura que se requieren medidas que eviten este tipo de situaciones, pero que aún más investiguen lo que viene ocurriendo.
Tania Galindo, habitante de la zona y protectora de estos animales, asegura que las autoridades ambientales han estado ausentes en medio de estos hechos que también se están volviendo problemáticos para las poblaciones circundantes.
"Como comunidad nos sentimos bastante vulnerados, preocupados y afectados por esta situación porque el Ministerio de Ambiente y las entidades ambientales no le están dando la importancia necesaria y la prioridad que requiere este caso", indicó Galindo.
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Frente a este tipo de casos, David Echeverri, jefe de la Oficina de Gestión de la Biodiversidad, Áreas Protegidas y Servicios Ecosistémicos de Cornare, explicó que si bien es muy difícil realizar exámenes que permitan determinar las causas de las recientes muertes, por la baja cantidad de registros se pueden catalogar como situaciones normales que en muchos casos responden a cuestiones de ciclos vitales.
"Realmente la problemática no es que aparezca uno que otro muerto cada ciertos años, eso es una una situación normal. Lo que realmente el problema es la reproducción descontrolada de los hipopótamos", expresó.
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Insistió el experto que antes que trabajar en la preservación de los hipopótamos en la zona lo que debe hacerse es continuar gestionando recursos de todo tipo para avanzar en el proceso de esterilización.
El más reciente convenio firmado con la Gobernación de Antioquia en agosto del año anterior propuso como meta la práctica de estos procedimientos a 20 individuos, de los cuales ya han pasado por el quirófano 18 y se espera que los dos restantes lo hagan antes de finalizar el mes de octubre.
"Estamos atendiendo parte de la situación conflictiva que es la reproducción descontrolada y si bien eso no va a eliminar el problema porque el problema es la presencia de ellos como tal, pues sí, atendemos parte del problema, que es evitar que se sigan reproduciendo de forma descontrolada", argumentó.
Frente a la translocación de los hipopótamos, una iniciativa en la que ya han manifestado interés países como México, Echeverri reconoció que el proceso avanza a paso lento no solo por requerimientos administrativos que hay que desarrollar desde el Ministerio de Ambiente en Colombia, sino por los trámites propios de las naciones de destino de estos animales.
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A pesar de ello reconoció que tienen claros los procedimientos para garantizar la salida de los hipopótamos del país en caso de que las respectivas autoridades aprueben estas acciones.
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