La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá y la Fiscalía General de la Nación realizaron dos operativos y cinco diligencias de registro y allanamiento donde pudieron capturar 7 personas e incautar más de 15 mil gramos de sustancias estupefacientes que serían comercializadas en diferentes instituciones educativas de Medellín.
En el primer caso y luego de 6 meses de labores de investigación, uniformados recolectaron suficientes pruebas para que la Fiscalía solicitara las órdenes de captura de seis hombres que integrarían un grupo delincuencial de la comuna Robledo.
Ante la orden se materializaron las capturas de estas personas entre los 30 y 54 años por los delitos de concierto para delinquir, fabricación, tráfico o porte de estupefacientes y suministro a menores de edad.
El modus operandi de estos delincuentes lo explica el teniente coronel, César Mauricio Rodríguez, comandante operativo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá.
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"Utilizaba golosinas para atraer niños, niñas y adolescentes cerca de una institución educativa que camuflaba con estupefacientes para inducirlos en el consumo de estupefacientes", dijo.
Ya en el segundo en el barrio Calasanz, gracias a la información aportada por la ciudadanía se llega hasta un inmueble donde las autoridades logran incautar 15 mil gramos de estupefacientes y la captura de un hombre de 27 años.
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La vivienda, presuntamente, era utilizada para almacenar las sustancias y dosificarlas para que posteriormente las distribuyeran en la comuna Robledo.
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