A la morgue del municipio de Tarazá, en el Bajo Cauca antioqueño, fueron llevados los cuerpos de los dos presuntos integrantes de grupos armados que fallecieron en medio de los enfrentamientos entre el Clan del Golfo y el frente Compañero Tomás del ELN , en la vereda El Tigre del municipio vecino de Cáceres.
Los cuerpos vestían uniformes de uso privativo de las fuerzas militares y sus identidades se desconocen.
Advierten sobre un recrudecimiento de la violencia en la zona
Ante estos hechos, defensores de derechos humanos como Óscar Yesid Zapata advierten que, si bien ya cesaron los enfrentamientos, la incursión de estos dos grupos armados en el territorio podría recrudecer la violencia en el territorio.
“Te muestra un escenario muy preocupante sobre posibles avanzadas territoriales, posibles fortalecimientos territoriales o planes de expansión territorial que ponen en riesgo a la población civil principalmente”, aseguró el líder de la Fundación Social.
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Pese a los enfrentamientos y recrudecimiento de la violencia en la zona, hasta la fecha no se reportan desplazamientos, pero si se mantiene el temor en la comunidad.