El panorama de seguridad en el Bajo Cauca antioqueño sigue generando preocupación, pues la persistencia de diferentes grupos ilegales por hacerse al control del territorio ha producido fuertes enfrentamientos donde la población civil podría ser una de las más afectadas.
Sin embargo, no fue así en esta ocasión donde organizaciones sociales y habitantes del territorio reportaron la muerte de cuatro personas que al parecer serían integrantes de grupos ilegales en medio de combates entre el Clan del Golfo y la guerrilla del ELN en el municipio de Tarazá.
Los hechos ocurrieron en un sector denominado El Piñal de la vereda El Doce y las víctimas fueron identificadas preliminarmente como Cristian Arroyo Moya, Carlos Alberto Ramos Ortiz, Iván Eduardo Beltrán Pérez y otra persona más cuyo nombre está por establecer que ya fueron recogidas de la zona y trasladadas al casco urbano de Tarazá por parte de una funeraria local.
El defensor de derechos humanos e integrante de la Fundación Sumapaz, Óscar Yesid Zapata, indicó que el reciente hecho es una muestra del serio peligro al que está expuesta la población civil de este territorio.
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"Esta zona del municipio de Tarazá en los últimos meses ha sido objeto de grandes tensiones por el control territorial entre estas dos estructuras armadas que se disputan este territorio. Hasta el momento no se conocen afectaciones a la población civil", señaló.
Desde diferentes organismos de la sociedad civil solicitaron la presencia oportuna de parte de la fuerza pública para minimizar la posibilidad de nuevas confrontaciones y la protección de los habitantes de esta zona del departamento.