Tal y como se había anunciado en el mes de febrero, cuando se dieron a conocer los resultados del piloto contra la extorsión que se aplicó durante el mes de diciembre, un compromiso en medio del espacio de la mesa de paz entre el Gobierno nacional
y los cabecillas de bandas del Valle de Aburrá, esta medida se extenderá por tres meses, comenzando justamente este viernes y extendiéndose hasta el sábado 21 de junio.
Aunque de momento los resultados no se cuantifican en números, sino que se hace de manera cualitativa, quienes tienen asiento en este espacio en la cárcel de Itagüí destacan que su implementación en un mes no solo ha tenido un resultado positivo, sino que ahora será mejor porque se pasa de 25 a 45 barrios de Medellín, Bello e Itagüí. Sebastián Murillo, conocido como Lindolfo, cabecilla de ‘La Oficina’ y vocero en este espacio dijo que es un gesto de paz.
"Con este gesto de paz, las estructuras manifiestan su voluntad por continuar este proceso y tratar de generar las condiciones para su culminación exitosa, buscando, como ya fue expresado anteriormente, que la paz tenga la oportunidad de ser irreversible", manifestó Lindolfo.
Frente a los cuestionamientos que ha habido de esta apuesta del Gobierno nacional por parte, por ejemplo del alcalde Federico Gutiérrez, la senadora Isabel Zuleta, como delegada del presidente en este espacio sociojurídico, defendió que sí hay un impacto positivo medible, no sólo en el delito de extorsión, sino en la baja de homicidios.
"Nosotros quisiéramos que el alcalde contara la verdad. Las acciones de paz son dirigidas desde la presidencia de la República. Y efectivamente lo que nosotros hemos demostrado es que en estos barrios, de manera concreta, acotada, vigilada por organizaciones que no están en este espacio y que se ha demostrado que los pilotos se han cumplido", señaló la senadora.
Justamente sobre uno de los puntos más álgidos de este proyecto que es cómo se mide que en los barrios se extorsiona o no, Alejandro Sierra, parte del equipo de Observación y sistematización de acciones de paz (EOSAP), argumentó que continuarán con entrevistas y reuniones con comerciantes y con conductores, además de diversas metodologías para medir el impacto .
"Yo creo que el avance que se presentó en el primer piloto fue muy positivo. Igual, vamos a realizar encuestas, vamos a estar intentando establecernos con diferentes sectores de la sociedad. Si es necesario, vamos a reunirnos también con autoridades de policía, con autoridades de alcaldía, si así lo disponen", indicó Sierra.
Según detalló Zuleta, este piloto tendrá impacto en unos 500.000 habitantes de los 10 barrios del territorio bellanita, 32 de la capital antioqueña y Los Naranjos, Las Acacias y La Aldea del municipio de Itagüí.
También destacó que se amplíe a 17 barrios más de Medellín, con especial importancia en la comuna 1, Castilla y Barrio Antioquia, donde se busca avanzar en procesos de desintoxicación de los jóvenes que han caído en la drogadicción.
Finalmente, aclaró Zuleta que los barrios elegidos son “en donde es posible cumplir el piloto”, por las condiciones que se tienen en el territorio, porque muchas de las estructuras al margen de la ley que operan en zonas de Medellín y el valle de Aburrá no tienen asiento en esta mesa. Por ejemplo, citó la senadora, el Clan del golfo y el tren de Aragua, además de otros grupos que hacen presencia en la ciudad.
Fuera de bandas como ‘La Oficina’, en este espacio de diálogo también tiene representación ‘Los Pesebreros’, ‘El Mesa’, ‘La Terraza’, ‘Los Pachelly’, ‘Niquía Camacol’, ‘Los Triana’ y ‘La Agonía’.