Durante un acalorado debate en la Comisión Primera del Senado de la República, el ministro del Interior, Alfonso Prada, salió al paso a las críticas que ha recibido la ponencia de la reforma política por cuenta de la inclusión de varios artículos polémicos como la posibilidad de que los congresistas puedan volverse ministros sin perder su curul, la prevalencia de los actuales congresistas en la conformación de las listas para las próximas elecciones, lo que podría abrir la puerta a una reelección inmediata en 2026.
El funcionario señaló que comparte varios de los reparos que hay al articulado e incluso que el Gobierno no participó en la construcción de la reforma.
“Esta mañana, hablando con el presidente me decía que, si no se mejoraba la reforma, el propio Gobierno va a pedir su hundimiento y que comencemos de cero”, reveló el mininterior.
Prada sostuvo que el Gobierno no está casado con prejuicios, pero no renuncia al principio de debatir y defender los aspectos positivos de la reforma política que, según los autores, está encaminado a la defensa de la paridad de género, el fortalecimiento de los partidos políticos y la lucha contra la corrupción electoral.
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Aunque se esperaba que se votara una ponencia de archivo de la reforma propuesta por los senadores Paloma Valencia y Jorge Benedetti, y que contaba con los votos suficientes, la sesión se fue dilatando hasta el punto de generar momentos de tensión entre los congresistas del Pacto Histórico Alexander López y María José Pizarro, y el senador del Partido Verde Jota Pe Hernández, quien criticó esta reforma como ‘politiquera’.
Incluso el senador López reconoció que algunos puntos de esta reforma no son los deseados, pero que se debe avanzar en garantizar la profundización de la democracia y el pluralismo político. Anunció, además, que esperan presentar el próximo 20 de julio una reforma estructural que toque los elementos propios de la ingeniería electoral como las autoridades electorales y la organización de los comicios.
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