El nuevo proyecto de reforma tributaria llega en medio de consensos al Congreso, en un país golpeado por la pandemia del COVID-19 y más de dos meses de protestas. En ese panorama, hay expectativa en los gremios productivos, que se han visto seriamente impactados por ambas crisis.
El presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal, espera que el trámite de la iniciativa en el Congreso incluya más subsidios productivos, en especial para proteger y apoyar a la pequeña y mediana empresa.
"Quedamos a la espera de una tasa de renta diferencial como lo había anunciado el Gobierno para las MiPymes que han sufrido y han sido totalmente vulnerables a esta situación de la pandemia y el paro nacional" dijo Cabal.
El proyecto se enmarca en varios factores, entre los que se resaltan la extensión de los programas sociales que arrancaron en medio de la pandemia, la austeridad en el gasto público, la lucha contra la evasión, el fortalecimiento de la formalización y los aportes del sector empresarial con mayores ingresos. Su principal objetivo será no tocar a la clase media del país, algo que el presidente de Fedegán, José Félix Lafaurie, considera insuficiente en materia de recaudo frente a las pérdidas que se presentaron.
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"Es un paso adelante, absolutamente, insuficiente para poder cuadrar las finanzas públicas que evidentemente acusan un déficit que muy seguramente este año rondará el 8.4 % del PIB en Colombia”, señaló Lafaurie.
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El sector de producción de alimentos, que sufrió millonarias pérdidas por los bloqueos del paro nacional, instó al Gobierno para que en el trámite de la reforma en el Congreso se mantenga la posición de no tocar el precio de los alimentos de la canasta familiar.
"No se va a tocar el IVA, lo cual debe verse reflejado en el texto de tal suerte que no se impacte el costo de alimentación para los colombianos”, manifestó el presidente de la SAC, Jorge Enrique Bedoya.
Por su parte, el presidente de Fenavi, Gonzalo Moreno, manifestó: “Entendemos la necesidad del flujo de caja del Gobierno y la necesidad de recursos para mantener muchas de las inversiones sociales que se tienen y apoyamos como sector productivo, siempre y cuando no se toque la canasta familiar”.
En el mismo sentido se pronunció el presidente de Porkcolombia, Jeffrey Fajardo: ”El Gobierno nacional está cumpliendo con su promesa de no tocar la estructura de IVA y no alterar la canasta familiar en ningún sentido en esta reforma, y por eso desde el lado de Porkcolombia estamos a la expectativa, pero tranquilos en que se va a dar ese cumplimiento”.
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En materia empresarial, el nuevo proyecto de reforma fiscal contempla reducir a un 50 % el beneficio tributario que permite descontar el ICA del impuesto de renta para las empresas, lo que tendrá un recaudo cercano a los 3,9 billones de pesos.
Además, incluye un aporte solidario de renta del 35 % de las empresas para el financiamiento de la inversión social, con lo cual no se compromete la competitividad del país, ya que es una tarifa menor a la de 2018, cuando se encontraba en 37 %. Con esto se espera recaudar cerca de 6,7 billones de pesos.
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También se contempla la extensión de la sobretasa al sector financiero de tres puntos porcentuales, desde 2022 hasta 2025, que implicaría un recaudo de 415.000 millones de pesos, según precios de 2023. La normalización tributaria para el año gravable 2022 espera recaudar 300.000 millones de pesos en 2021 y 360.000 para 2022.
Por: Valentina Rodríguez
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