El Gobierno de Gustavo Petro inició una estrategia de comunicación no exenta de polémicas: la contratación de influencers para defender y promover las acciones de su administración. Esta estrategia, que ha sido defendida por varios funcionarios del Gobierno, como Gustavo Bolívar, director delDepartamento para la Prosperidad Social (DPS) , se centra en utilizar las redes sociales como plataforma clave para comunicar los logros y contrarrestar la desinformación.
Walter Alfonso Rodríguez, más conocido como ‘Wally Opina’, es uno de los influencers contratados por el Gobierno de Petro. En una entrevista reciente en Mañanas Blu, con Néstor Morales Wally defendió la contratación de influencers y aseguró que "son profesionales en comunicación" y no simples figuras públicas con seguidores. Según él, estos influencers no llegaron al Gobierno solo por su popularidad en redes sociales, sino por su capacidad demostrada de comunicar de manera efectiva.
Lo que está pasando es que está llegando personas que son absolutamente idóneas para cargos de comunicación. Yo escuchaba ahorita que estaban mencionando a Celso, a Lalis. Ellos son profesionales en comunicación. Es decir, no es que hayan llegado allá por el hecho de tener seguidores
Wally explicó que la llegada de estos comunicadores al Gobierno es una decisión acertada, ya que han mostrado ser capaces de llegar a un público amplio y diverso.
“Son personas que se han capacitado para eso, que han demostrado resultados", aseguró, refiriéndose tanto a él como a otros influencers contratados.
Contratos y controversias de influenciadores
La Fundación para la Libertad de Prensa reveló que el Gobierno de Petro ha destinado montos considerables para la contratación de estos influencers. Por ejemplo, Wally recibió un contrato de 45 millones de pesos para crear contenido jurídico para las plataformas de RTVC. Otros influencers como María Niny Echeverry y Jader David Rozo, conocido como ‘Don Izquierdo’, también han firmado contratos significativos para apoyar la comunicación gubernamental en redes sociales y medios digitales.
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Estos contratos han levantado críticas, especialmente en un contexto donde otros sectores, como el deporte, han visto recortes presupuestarios. Sin embargo, Wally argumenta que estos fondos están bien utilizados, ya que los influencers están realizando un trabajo esencial de comunicación.
"No hay absolutamente nada de malo en que personas capacitadas estén ayudando al gobierno a comunicar sus logros", afirmó.
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La defensa de la estretegia de influencers en el Gobierno
GUstavo Bolívar
uno de los defensores más vocales de esta estrategia, ha señalado que la contratación de influencers es crucial para combatir la desinformación y las calumnias contra el gobierno. Según Bolívar, los influencers contratados no solo ayudan a difundir información veraz, sino que también juegan un papel clave en aclarar las tergiversaciones que, según él, son frecuentes en los medios tradicionales.
Wally, por su parte, respalda esta visión y critica a los medios de comunicación convencionales, acusándolos de desinformar al público. "Creo que todas las personas que están cansadas de medios como Blu Radio o Caracol están volcándose a influencers o medios alternativos que no tienen relación con una agenda económica", comentó.
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A pesar de las defensas presentadas por Wally y Bolívar, la estrategia no ha estado exenta de cuestionamientos éticos. Durante la entrevista, se le preguntó a Wally sobre la "línea ética" que los influencers afines al Gobierno podrían estar cruzando, especialmente en el contexto de la polarización política en el país. Wally rechazó estas acusaciones, sugiriendo que los medios tradicionales también han fallado en mantener estándares éticos rigurosos.